Los gallegos de Montevideo recuperan el histórico panteón
Perdido con la intervención de la Casa de Galicia, fue reabierto el jueves tras meses de gestiones para su devolución
redacción / la voz, 05 de noviembre de 2023. Actualizado a las 05:00 h. 0 0
Dos símbolos caídos con la dolorosa intervención de la Casa de Galicia de Montevideo fueron recuperados por la colectividad gallega en la capital uruguaya en los últimos días. Si el martes se abría al público la posibilidad de visitar en el museo Zorrilla de Montevideo la escultura A Santa de Asorey, el jueves se reabrían las instalaciones del panteón de la Casa de Galicia, cuya gestión habían perdido los antiguos miembros del centro gallego.
En realidad, el panteón fue una de las pérdidas más sentidas por los gallegos vinculados a la Casa de Galicia, entidad propietaria de una mutua sanitaria que acumuló una deuda millonaria y que provocó la intervención del Gobierno. Todos los bienes de la entidad fueron asumidos por el Estado uruguayo, que luego los subastó, entre ellos uno de los hospitales referenciales del país. La intervención supuso tener que reubicar a casi 43.000 mutualistas y a un colectivo de trabajadores que superaba los 2.500.
La disolución de la Casa de Galicia revirtió en la creación de una entidad nueva cuyo principal objetivo fue el rescate del patrimonio cultural que había pertenecido a la histórica organización creada en 1917 y la recuperación de la gestión del panteón en el que no solo reposan centenares de gallegos emigrados a Uruguay sino los derechos de otros muchos que esperaban que este lugar fuera su última morada.
La escasez de recursos económicos de la nueva entidad —llamada A casa de Galicia centro histórico cultural— complicó en un primer momento la recuperación del panteón, que pasó a ser de titularidad municipal. Sin embargo, el jueves culminó el proceso de entrega de la gestión de este camposanto con un acto al que asistió la cónsul de España en Montevideo, María Victoria Scola y la delegada de la Xunta en la capital uruguaya, Elvira Domínguez.
Durante el período en el que el Panteón ha estado fuera del control de los emigrantes gallegos, la instalación había sufrido diversos problemas que contribuyeron a su deterioro, acelerando la inquietud por parte de la colectividad gallega, que les llevó a acelerar las gestiones para su recuperación. El jueves, día de Difuntos, finalizó el largo proceso: «El desafío para mantener estas obras es grande, pero sin duda estará a la altura de lo que los gallegos en Uruguay podemos conseguir», manifestaba José Antelo, miembro de la directiva de la nueva Casa de Galicia. Al acto, que tuvo como eje central una misa, asistieron dos centenares de personas. En el panteón descansan muchos de los gallegos que contribuyeron al desarrollo de Montevideo ya que la colectividad gallega en esa ciudad fue una de las principales de América.