1.744 esclavos gallegos

Antón Grande TRIBUNA

CUBA

OSCAR CELA

04 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

No cabe la menor duda de que en los 500 años de vivencia de La Habana los gallegos, y entre ellos muchos lucenses, tuvieron mucho que ver en la historia de esta ciudad y de la isla de Cuba. Actividades, muchas de ellas, que repercutieron de forma favorable en la capital habanera y en nuestros paisanos, y otras, la parte negativa y que constituyen la leyenda negra de todos los años de colonialismo español en La Perla de las Antillas.

Una de estas historias negativas lA constituye la esclavitud que sufrieron casi 2.000 gallegos que acudieron, engañados por otro paisano, como trabajadores y acabaron como esclavos durante dos años.

A mediados del siglo XIX la esclavitud comenzó a ser prohibida por países como Inglaterra, Holanda o Francia y en su cruzada contra esta explotación humana enviaron sus flotas hacia Cuba para impedir que los barcos de negreros descargasen la carga humana de esclavos que transportaban. De esta manera, abordaban los buques y dejaban en libertad a los negros que traían como prisioneros.

Esto creó un problema de mano de obra en La Habana y muchos terratenientes comenzaron a buscar soluciones. Entre ellos se encontraba Urbano Feijoo Sotomayor y Cejo, diputado en Cortes por Ourense y nacido en Viana do Bolo, que residía prácticamente en la isla, en donde tenía grandes explotaciones. Tras pedir permiso a la reina Isabel, lanzó una convocatoria de empleo entre los gallegos a la que respondieron muchos ante las necesidades que aquí existían. Así, se embarcaron hacia Cuba.

Al llegar allí engañados, Urbano Feijoo y otros terratenientes los encadenaban y les daban tratamiento de esclavos, pagándoles incluso menor salario. Esta situación duró dos años, de 1853 a 1855, hasta que alguno de estos gallegos logró enviar una carta a sus familiares explicando la situación.

Inmediatamente la carta fue llevada al gobierno, que llamó al orden a Feijoo, al que recriminó su actuación, al tiempo que se daba condición de libertos a los esclavos gallegos, un total de 1.744. Lo más curioso es que a pesar de todo, Feijoo salió reelegido nuevamente como diputado.