Fallece Emilio Castro, el empresario que hizo de Pórtico la referencia de la decoración en Galicia
VENEZUELA
Emigrante en Venezuela, recibió la medalla de oro del Círculo de Empresarios
13 ago 2021 . Actualizado a las 00:54 h.Durante muchos años, antes de la llegada de Abel Caballero a la alcaldía, la Navidad comenzaba en Vigo cuando Pórtico inauguraba la decoración en su tienda de Policarpo Sanz a finales de noviembre. Detrás de esa estrategia comercial estaba Emilio Castro, un hombre hecho así mismo que ayer fallecía en Vigo a la edad de 88 años.
Este empresario nacido en la localidad ourensana de Celanova había emigrado a Venezuela en los años cincuenta del pasado siglo, como otros miles de compatriotas, con la intención de mejor sus perspectivas de futuro. En el país sudamericano, logró, no sin esfuerzo y tesón, poner en marcha una gran empresa, Almacenes Cortes, que llegó a contar con cincuenta tiendas dedicadas a la venta de telas.
Cinco años más tarde, el empresario ourensano compraba Pórtico, una empresa nacida en Vigo en 1965, con la intención de retornar con sus negocios a España. Y lo hizo. En Vigo, donde fijaría su residencia a partir de entonces, se casó con la viguesa María del Carmen Montenegro, con quien tuvo tres hijos, Emilio, Marta y Patricia.
Desde entonces, la empresa no dejó de crecer, especialmente con la entrada en el negocio de la segunda generación familiar. Con la gerencia de su hijo, también llamado Emilio Castro, pero siempre con los consejos del padre, este proyecto empresarial trascendió las propias fronteras gallegas para expandirse por otras comunidades españolas y alcanzar mercados sudamericanos, de Italia y de Portugal.
En el año 2011, el grupo empresarial contaba con 1.200 empleados y más de 140 tiendas propias o asociadas centradas en artículos de decoración, regalo y muebles. Entonces, la empresa facturaba 67 millones, pero, tan solo unos años antes, llegó su facturación a los 120 millones. Emilio Castro recibía la medalla de oro del Círculo de Empresarios de Galicia ante la presencia de Alberto Núñez Feijoo, presidente de la Xunta. Luego, la crisis económica golpeó duramente a Pórtico SA, hasta el punto de que el proyecto sucumbió en el 2015, no sin antes afrontar distintas posibilidades de supervivencia y un duro proceso concursal.
El carácter luchador de Emilio Castro, transmitido a sus hijos, provocó que abrieran varios proyectos empresariales tanto sus hijos como él mismo, aunque él ya no participa con la misma fuerza que años atrás.