El lucense que promociona de forma altruista a la hostelería de Lugo desde Londres

André Siso Zapata
ANDRÉ S. ZAPATA LUGO / LA VOZ

REINO UNIDO

«Si no nos ayudamos entre paisanos, ¿quién lo hará?», explica Alberto, estudiante de márketing en la capital inglesa

05 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

En unos momentos de dificultad máxima para el conjunto de la sociedad, hay un sector de ella que sufrido los efectos de la pandemia no solo a nivel personal, sino también en el profesional, de forma directa: La hostelería. En el caso de Lugo, una ciudad que basa gran parte del negocio hostelero en el turismo gastronómico, las consecuencias de las duras restricciones que se han sucedido desde el pasado mes de marzo podrían significar un duro golpe para todos estos negocios.

Alberto Lage, un joven lucense residente en Londres, se dio cuenta de que muchas familias podían estar pasando unos malos momentos a raíz de esta situación, por lo que tomó una decisión muy imaginativa. Gracias a sus conocimientos de márketing, algo que estudia en la capital británica actualmente, decidió que era una buena idea promocionar a los establecimientos de hostelería de Lugo de forma totalmente altruista, sin cobrarles un céntimo. Desde hace menos de una semana, se puso en contacto con varios de estos locales, y ya ha realizado trabajos tales como diseño de logotipos, creación de menús, promoción en redes sociales o cartelería. Todo, desde el salón de su casa, a más de 1.000 kilómetros de la capital lucense.

-¿Cómo nació esta idea?

-Sinceramente, no es nada espectacular. La cosa es que yo me informo bastante a través de la prensa gallega de lo que sucede allí, así que sé lo que está pasando con los negocios de hostelería de Lugo, por ejemplo, y también mis familiares me comentan siempre que la situación está volviéndose muy complicada debido al avance del virus. Un día, volviendo a casa en el metro, me planteé que debía haber una forma en la que yo podía ayudar a estos comercios. o le tengo un aprecio tremendo a Galicia, a Lugo, que es mi tierra y la siento cerca aunque esté lejos, así que dije: Si no nos ayudamos entre paisanos, ¿Quién va a hacerlo? Como estudio márketing, pues decidí que podría hacerle promoción y diseñarles algo de publicidad a los locales que lo necesitasen. Así que hace cinco días empecé a contactar con todos los que pude, y he de decir que la recepción ha sido genial por el momento.

-¿Por qué hacerlo de forma tan altruista?

-No me gusta el protagonismo, y no quiero que la gente piense que hago esto por un interés personal. No les he pedido nada a los negocios con los que he hablado y no quiero nada a cambio. Simplemente lo hago porque considero que les puedo ayudar de una forma humilde. De hecho, no me gusta que se sepa demasiado públicamente que hago esto, porque parece que pierde ese «sin ánimo de lucro» que quiero llevar por delante, pero estoy contento de que me hayan agradecido el gesto. Y

-¿Cómo ayudas exactamente a estos locales?

-A mi me encanta el márketing, la publicidad, desarrollar marcas, así que decidí que por aquí podría ir mi ayuda. Hay muchos negocios que tienen un gran producto y un gran servicio pero apenas tienen promoción, así que intento echarles una mano con eso. A unos les hice un logotipo para su local, a otros les hice un menú para que pudiesen imprimirlo y usarlo, a varios les intenté mejorar la difusión por redes sociales... Son varios los frentes por los que se puede actuar para mejorar la imagen de marca.

-¿Y todo esto lo has hecho tú solo?

-Para nada. Primero, he contado con el apoyo de varios de mis amigos, que me han ayudado en todo lo que les he pedido. Y segundo, por parte de los propios negocios, que han puesto mucho de su parte.

«Hubo un momento en el que necesité ayuda y no la tuve, por eso ahora se la ofrezco yo a quien la necesita»

Alberto, lucense de origen y londinense de adopción, nunca tuvo nada regalado. Todo lo que tiene ahora es porque se lo ha ganado. Y no fue poco el esfuerzo.

—¿Por qué te fuiste a Londres?

—Con 18 años, me fui a Madrid a estudiar diseño de moda. Por asuntos personales no pude terminar de estudiar allí, así que me volví a Lugo. En aquel momento me hubiera gustado recibir algo de ayuda, pero nunca la tuve. Unos años después, me sentía frustrado y decidí venirme a Londres en busca de una oportunidad. Empecé a estudiar márketing y ahora puedo decir que me va mucho mejor.

—¿Puede que tu experiencia haya hecho que empatices más con quien lo está pasando mal?

—Desde luego. Como yo no tuve ayuda cuando la necesité, creo que es mi deber dársela a quien ahora la necesite si eso está en mi mano.

—¿Con qué locales colaboras ahora mismo?

—De momento son ocho los bares y restaurantes de Lugo con los que he hablado. Son el restaurante España, el Campos, la parrillada El Caminito, la raxería A Laxa, la pulpería A Lareira, el Cachivaches, el restaurante Paprica, la pizzería Di Totó y la Hamburguesería Babel. Todos han puesto su grano de arena y han colaborado para que todo salga lo mejor posible. Todo con el hashtag #HoxeComemosEnLugo.

—¿Cómo planeas continuar con el proyecto?

—Espero que vaya para adelante, y que podamos ayudar a la máxima gente posible. Mi familia ya me dijo que «ya estoy otra vez con una de las mías» y mi pareja me dice que parece que estoy ganando algo con esto (ríe), pero lo cierto es que sí me lo he tomado en serio.