Lleno en el primer vuelo desde Londres, y sin distancia de seguridad

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

REINO UNIDO

Omar Casal fue recibido por su familia con abrazos y pancarta de bienvenida
Omar Casal fue recibido por su familia con abrazos y pancarta de bienvenida XOAN A. SOLER

Los pasajeros que llegaron a Lavacolla critican la laxitud de las medidas anticovid

03 jul 2020 . Actualizado a las 11:27 h.

Tras el largo parón impuesto por la pandemia, Ryanair ha reanudado su conexión aérea entre Londres y Santiago. El primer avión aterrizó ayer a las 17.15 horas en Lavacolla. Puntual y lleno hasta la bandera de muchos españoles deseosos de poder abrazar a los suyos otra vez. A la gran mayoría las medidas de seguridad les parecen del todo insuficientes, pero tampoco quieren pensar mucho en ello. Pesan más las ganas de pisar de nuevo Galicia y recargar las pilas tras meses de mucha tensión y miedo. Sensaciones que en el Reino Unido no han desaparecido, porque allí siguen con cifras altas de fallecidos y contagiados ante la pasividad del Gobierno de Boris Johnson.

Esas medidas de seguridad son casi inexistentes en el aeropuerto de Gatwick. «Non hai ningunha e a máscara é opcional», señala Omar Casal, de Narón, al que su madre y sus hermanas sorprendieron con un recibimiento con pancarta de bienvenida incluida. Una vez que se aterriza en Santiago, hay que entregar un documento con datos personales que permitirían localizar al pasajero en caso de que fuese necesario rastrearlo si aparece algún contagio. También es obligatorio tomarse la temperatura, «e hai dúas enfermeiras que se supón que están aí por se alguén dá positivo», explica Omar, que vive y trabaja en Londres y tendrá que regresar cuando su empresa, del sector de la hostelería, reanude la actividad.

A Álvaro Noray, un madrileño que hizo escala en Lavacolla para poder ver a su novia tras cuatro meses separados, también le parecieron pocas las medidas de seguridad. «En el formulario que te hacen entregar tienes que informar de si has pasado el virus o si has estado en contacto con algún positivo confirmado, pero también dar tu dirección, número de teléfono e incluso el asiento en el que te has sentado», cuenta. Medidas que permitirían a las autoridades rastrear el posible recorrido del coronavirus en el caso de que alguno de los pasajeros del vuelo estuviese contagiado o desarrollase la enfermedad.

Sin distancia de seguridad

El primer avión desde Londres a Santiago tras levantarse el estado de alarma vino lleno, por lo que los pasajeros no pudieron mantener dentro de la cabina la distancia de seguridad de al menos un metro. Por eso es obligatorio llevar puesta la mascarilla durante el viaje. Más allá de esa circunstancia, todo se desarrolló como antes de la pandemia. «Serviuse comida e bebida e, evidentemente, nese intre non podes levar posta a máscara», señala Eloy Rodríguez, de Gondomar (Pontevedra), que vive en el Reino Unido y no venía a Galicia desde diciembre del 2019.

En la terminal compostelana, eso sí, se han colocado dispensadores de gel hidroalcohólico, el uso de la mascarilla es obligatorio y se ha restringido el número de personas que pueden usar a la vez los ascensores.