Un cirujano gallego recurre a la UE para poder trabajar en España

Raúl Romar García
r. romar REDACCIÓN / LA VOZ

REINO UNIDO

Lleva 20 años en Inglaterra, pero la ley le impide presentarse a una plaza

23 oct 2019 . Actualizado a las 20:07 h.

Si la Xunta o cualquier otro gobierno de la mayoría de las comunidades quisiera fichar a Joan Massagué para dirigir el servicio de Oncología en alguno de sus hospitales de referencia no podría hacerlo. No podría ni aunque el catalán, director del Memorial Sloan Kettering Center de Nueva York y uno de los mayores referentes mundiales en investigación contra el cáncer, estuviese dispuesto a regresar a España y a bajarse un 90 % su sueldo. La ley en vigor en la mayor parte de las autonomías se lo impediría, ya que solo permiten optar a las plazas de jefe de servicio el «personal estatutario fijo». O, lo que es lo mismo, los ya tienen una plaza en el Sistema Nacional de Salud, lo que en la práctica, y a falta de que se creen otras figuras, supone una barrera al retorno del talento médico español que triunfa en el mundo. Y este es el muro que intenta derribar el cirujano gástrico gallego Alberto Martínez-Isla, que con veinte años de experiencia en el Reino Unido, donde ejerce como cirujano consultant en el Hospital Saint Mark´s de Londres, la máxima categoría profesional en el país, ha recurrido a la Comisión Europea para que le permitan presentarse a una plaza en España acorde con su rango.

Martínez-Isla expuso primero su caso al Ministerio de Sanidad y luego al propio presidente del Gobierno, pero ante las largas recibidas fue cuando decidió presentar la denuncia a Europa. La CE aceptó su caso a trámite y ya ha requerido la información correspondiente al Gobierno español. Ahora está examinando la información recibida para decidir si abre o no un expediente contra España por vulnerar la normativa comunitaria en lo referente a la libre circulación de trabajadores.

«Me parece algo increíble y vergonzoso que impidan el retorno del talento al país, y aparte es ilegal. Esto no pasa en ningún otro Estado europeo, porque tengo colegas que hicieron su carrera profesional en el Reino Unido y luego regresaron a sus países sin que les pusieran trabas», denuncia el profesional coruñés, el primer español en acceder a la categoría de consultant en Gran Bretaña.

Hace dos años lo intentó fichar la gerencia del hospital de León como jefe de servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo y más tarde el de Salamanca, pero tuvieron que desistir una vez que fueron advertidos de que la ley regional no lo permitía. Y lo mismo ocurre en Galicia, donde Martínez-Isla se acaba de presentar a la plaza de jefe de servicio de Cirugía General y Aparato Digestivo convocada por la gerencia de Gestión Integrada de Ferrol. Aún no se ha resuelto, pero el médico no confía demasiado en que su solicitud sea aceptada. «No pido que me den la plaza -dice-, si no que me dejen presentarme. Si no lo consigo pondré el caso en manos de mis abogados», advierte.

«Persoal estatutario»

Desde la Consellería de Sanidade confirman que, aunque se valoran como méritos «o traballo prestado nos servizos públicos dos países da UE», es necesario que el candidato sea «persoal estatutario». Y así también consta en las bases de la convocatoria. No cuenta que el candidato, en ese caso, haya estudiado Medicina en Santiago, hecho el MIR en un hospital de Madrid y trabajado durante cinco años en Povisa, en Vigo, antes de iniciar la aventura británica.

Pese a estas dificultades, Martínez-Isla está dispuesto a continuar con su lucha. «Yo tengo en Inglaterra una vida confortable y si regreso a mi país tendría que renunciar al 70 % de mi sueldo, lo que tampoco me importaría, pero hay gente que está en una situación distinta y a la que en España se le están cerrando las puertas, lo que es un auténtico drama. Es curioso que en tu propio país te traten de extranjero, con la falta que hace el talento», asegura. Confía en que Europa acabará remediando la situación.

En España solo cuatro comunidades -Navarra, País Vasco, Cataluña y Aragón- cuentan con leyes que permitirían contratar a profesionales del extranjero.