El Museo Nacional de Ciencia y Tecnología acogió ayer, con motivo de la celebración del centenario del Instituto Español de Oceanografía (IEO), una jornada divulgativa en la que se repasó la evolución de la investigación del mar gallego en el último siglo.
De las ponencias se encargaron Antonio Calvo, periodista científico y presidente de la Asociación Española de Comunicación Científica, y Juan Pérez de Rubín, investigador del IEO. El primero realizó un repaso por la vida de Odón de Buen, fundador del IEO, de quien dijo que «ha sido injustamente olvidado», a pesar de tratarse de una figura clave para la ciencia en España y un personaje «que seduce a medida que se le va conociendo».
Destacó Calvo la faceta política del científico, comprometido con la República, encarcelado durante la Guerra Civil y posteriormente exiliado. Pero también resaltó su compromiso con la divulgación científica y la enseñanza «en una época en la que en las universidades se hablaba de bichos, pero no se iba al campo a tocarlos». Un hombre, aseguró Calvo, que «no destacó por sus investigaciones, sino por crear un marco adecuado para que hubiese investigación en España».
Por su parte, Pérez de Rubín recorrió los hitos de la historia de la investigación marítima, empezando por el naturalista Mariano Graells, creador de las primeras parcelas de cultivo de ostras en Galicia.