Casi 300 alumnos de la Universidad de Vigo retan a la pandemia y se van de Erasmus

María Jesús Fuente Decimavilla
maría j. fuente VIGO / LA VOZ

EMIGRANTES A CORTO PLAZO

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Los estudiantes califican su experiencia de «increíble» y destacan la tranquilidad con la que se afronta la situación sanitaria

01 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

No es precisamente el mejor momento para salir de casa, y mucho menos para ir al extranjero. Aun así, han decidido sacrificarse para no frenar su formación. Son 290 los alumnos de los tres campus de la Universidad de Vigo que solicitaron una beca de intercambio para otro país. La cifra no es desdeñable en el momento actual, pese a alejarse de los 679 del curso pasado.

De los cerca de trescientos alumnos que han decidido darlo todo en su etapa de Erasmus, 209 ya se encuentran en las universidades de acogida, mientras que el resto irán en el segundo cuatrimestre. Dominan las chicas (179) frente a los chicos (111).

Los países de destino preferidos siguen siendo los mismos, pese a la situación sanitaria. Están encabezados por Italia (64), Polonia (52) y Portugal (47). Por campus, el de Vigo es el que más Erasmus aporta (160), seguido de Pontevedra (68) y Ourense (62).

La Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales es la que envía más estudiantes al extranjero (59), seguida de Filología y Traducción (31), Ciencias Sociales y de la Comunicación (29) y Ciencias de la Educación y Trabajo Social (27).

Entre los primeros que se fueron está Giselle García Carabelos, de A Guarda, y estudiante de Educación Infantil en el campus de Ourense. Eligió Bolonia para completar sus estudios y no se arrepiente. «Iba con la preocupación lógica, pero las cosas están parecidas a España y como la experiencia no se puede repetir en cuarto, decidí seguir adelante», explica desde la ciudad italiana. Tanto le gusta la experiencia que está dispuesta a repetir el próximo curso en otra ciudad española. La clases son en línea y le llama la atención la forma de evaluar a través de trabajos u oral. «Hay mucha flexibilidad horaria para permitir conciliar estudios y trabajo y, si no puedes ir a un examen, te ofrecen más convocatorias para darte la oportunidad de aprobar o mejorar las notas, por eso son más altas», comenta.

Sobre el covid, indica que al principio, cuando llegó, hubo muchos casos porque aún no se llevaba mascarilla, pero se prestaba mucha atención. «Nos informan, nos envían correos, es todo muy tranquilo, no hay tanto estrés como en España por la temática», apunta.

La misma tranquilidad detecta Elena Martínez, una de las dos estudiantes de la Universidad que están en México, en su caso en la ciudad de Ensenada, donde continúa Ciencias de Mar. «Este curso es mi último año y mi última oportunidad de realizar una movilidad y no quería desaprovecharla». Su experiencia, dice, esta siendo «increíble». Las clases teóricas son virtuales y las prácticas, presenciales.

Daniel Rodríguez eligió Rumanía para su tercer curso de grado en Economía. No quería esperar un año más. «Está siendo insuperable». Las clases son en línea y bastante dinámicas, algo que agradece. Las medidas por la pandemia son ahora similares a las de España. Hay toque de queda desde las 23.00 a las 5.00 horas, mascarillas y prohibición de fiestas privadas.

También está en Rumanía Diego Estévez, de cuarto de Administración y Dirección de Empresas. Completará todo el curso en la Academia de Studii Economice. El destino que escogió le parecía enriquecedor y no quería olvidarse del Erasmus, porque «es una oportunidad y sería de locos dejarla pasar».