Max García Conover, cantautor americano de culto descubre en Pontevedra las raíces de su bisabuelo

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

ESTADOS UNIDOS

SON CANCIONES

Con domicilio en Maine, Conover está por primera vez en Galicia, la tierra de su bisabuelo, para grabar su nuevo trabajo discográfico en un estudio desmontable habilitado en «unha mansión de máis de catrocentos anos»

12 abr 2024 . Actualizado a las 19:17 h.

Antes de recalar esta semana en A Bandeira, Max García Conover, cantante estadounidense, desconocía, incluso, su ubicación. Pero en su descargo, todo hay que decirlo, desde la discográfica Son Canciones dudaban, de igual modo, «que alguén en Bandeira coñeza a existencia deste cantautor neoiorquino de culto».

Pero su estancia en A Bandeira no es casual. A fin de cuentas, tiene por costumbre «gravar a súa música na máis estrita intimidade, nun faiado dunha casa centenaria de Maine, con vistas ao océano Atlántico máis cabreado». Desde este punto de la geografía estadounidense donde Stephen King y John Connolly suelen situar sus novelas, Max García Conover «conseguiu que as súas cancións cheguen aos recunchos máis inesperados do mundo. Con máis de vinte millóns de escoitas en Spotify e centos de concertos en toda Europa e EE.UU. no seu haber, Conover converteuse nun músico de culto» hasta el punto de que la prensa lo llegó a comparar con Woody Guthrie, Josh Ritter y Dylan Thomas, mientras que todos recuerdan sus colaboraciones con Haley Heynderickx y The Ballroom Thieves.

Este abril hizo sus maletas para viajar por primera vez a Galicia aceptando la propuesta de Son Canciones, pequeño sello discográfico barcelonés dirigido por dos personas con profundas raíces en la comunidad autónoma. De este modo, «atoparon unha mansión de máis de catrocentos anos preto da Bandeira, en la provincia de Pontevedra, onde montarán un estudio desmontable para gravar o novo disco», al tiempo que aprovechará para realizar una pequeña gira por una serie de locales, de tal modo que hoy estará en A Casa de Arriba (Vigo), este sábado en O Panderetas, de Pontevedra, mientras que el domingo y lunes hará escala en Ourense y Santiago, concretamente, en el Café & Pop Torgal y en el Modus Vivendi, respectivamente.

SON CANCIONES

-¿Cómo surge este proyecto?

-Hace unos años tuve la suerte de encontrar una compañía de discos que se llama Son Canciones, una compañía pequeña y romántica a que les gustan las canciones pequeñas y románticas, como yo. No se si romántica es la palabra correcta en castellano, no quiero decir de amor, sino algo soñador e idealista. Hemos hecho algunos proyectos juntos y siempre quería grabar un disco entero con ellos. Cuando ellos me presentaron la idea de grabar aquí me deje todo y vine.

-Tengo entendido que no conoce Galicia, ¿cómo descubrió Bandeira?

-Son Canciones, que tiene raíces acá, ha organizado todo y estoy muy agradecido por estar aquí por la primera vez, especialmente porque yo también tengo una conexión en este lugar. Mi bisabuelo era de Pontevedra. Nunca le conocí, pero le di su nombre a mi hijo y estoy emocionado de estar en su patria.

-¿Cuál es el objetivo de esta iniciativa? ¿Cuando cree que estará el disco listo?

-Bueno, para mi la meta siempre es que las canciones salgan bien. Pero puedo hacer esto en casa, o por lo menos puedo intentarlo. Pienso que estoy aquí no solo por la belleza del lugar, sino la experiencia de sentirse lejos y cerca a la vez. Estoy cerca de la gente de Son Canciones y confío mucho en ellos, pero a la vez estoy muy lejos de casa. Pienso que esta combinación es importante para la creatividad, se hace un poco más fácil encontrar lo inesperado.

-¿Como definiría a súa música?

-Siempre digo que canto y toco la guitarra y cuando lo explico, finjo tocando la guitarra con mis dedos, y después me da mucha vergüenza haber hecho eso. A mi me fascinan las letras y pienso que mis canciones reflejan eso.

-Ofrecerá varios conciertos estos días, ¿qué vamos a encontrar en ellos?

-Muchas palabras bien elegidas en inglés durante las canciones, y un hombre de treinta y algo años haciendo lo mejor que puede contando historias en castellano -esta entrevista ha respetado su forma de expresarse en castellano por su expreso deseo- entre las canciones. Y si puedo encontrar un maestro de gallego, algo de eso también.

-Reside en Maine, ¿cómo afronta el contraste con Galicia?

-Bueno, acabo de llegar, pero pienso que probablemente tienen muchas cosas en común. Vivo en un pueblo cerca de la costa.

-Por cierto, ¿cuantas veces le preguntan por Stephen King cuando descubren que procede de Maine?

-(Risas) No tanto como me gustaría. Soy un fan. Lo vi una vez en una tienda.