Mejillón gallego a la conquista de Europa

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

INTERNACIONALIZACIÓN

MARTINA MISER

La principal organización de bateeiros de Galicia, Opmega, se ha marcado como reto abrir nuevos mercados para un producto que encaja con los gustos europeos

13 feb 2017 . Actualizado a las 10:30 h.

Sano, saludable y con un precio más que competitivo. Con esas tres etiquetas por bandera, los productores asociados a Opmega -la principal organización de bateeiros de Galicia- han decidido lanzarse a la conquista de nuevos mercados para su mejillón. Han puesto sus ojos en Europa Central. Alemania, Polonia o Austria son algunos de los lugares en los que Opmega tiene previsto hacer sus primeras incursiones comerciales esta misma primavera.

Los planes de la principal organización de productores, que integra a bateeiros de toda la costa gallega, obvian Francia e Italia, dos mercados maduros que, desde hace años, demandan ingentes cantidades de mejillón al sector gallego. Y es que, tal y como explica Ricardo Herbón, el presidente de Opmega, de lo que se trata es de cruzar nuevas fronteras, de abrir nuevas posibilidades de negocio, de expandir el gusto por el mejillón cultivado en las bateas gallegas. «Imos traballar en mercados nos que os nosos clientes non teñen presenza. Do que se trata é de ir abrindo camiño en zonas nas que agora non estamos, non de facerlle competencia aos nosos compradores vendendo en lugares nos que eles traballan», explica el presidente de la organización de productores.

Dispuestos a «fomentar e descubrir» nuevas posibilidades, los mejilloneros de Opmega han puesto sus ojos en mercados como el alemán y el polaco. No es la primera vez que el sector intenta llevar hasta ellos el producto de las bateas: hace diez años se lanzó una fuerte ofensiva, con campañas de promoción incluidas, para conquistar el paladar de los alemanes con el molusco gallego. Las guerras internas del sector y la crisis que llegó después dieron al traste con aquella fortaleza inicial.

Pero Opmega parece estar dispuesta, ahora, a saltar esa última frontera del mejillón gallego y volver a intentar hacerle un hueco en los mercados de Europa Central. En el diseño de esta operación se han estudiado todos los detalles, y se ha elaborado un plan operativo que se aplicará en los próximos ejercicios. En él se detallan los mercados a explorar, así como tareas de investigación que se deben abordar y proyectos de innovación que merecen ser tenidos en cuenta.

Pero vayamos por partes. De momento, Opmega está trabajando en el diseño de una marca que sirva para introducir su mejillón en los mercados centroeuropeos. Además de desarrollar dicho marchamo, la organización de productores está estableciendo las fórmulas que utilizará para hacer llevar su producto hasta esos nuevos mercados. «Levar o mexillón fresco resultaría bastante complicado, pero afortunadamente hai moitas fórmulas para facelo chegar alá en perfectas condicións. Bandexas, media cuncha...», razona el presidente de Opmega, que considera que la calidad del producto hará buena parte del trabajo de conquista.