Un porriñés enseña fútbol en China

alejandro martínez O PORRIÑO / LA VOZ

ASIA

Alejandro Martínez

Ficha una temporada para entrenar en una de las academias que constituyen la cantera juvenil de la ciudad más densamente poblada ayudado por intérpretes

20 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

De O Porriño a China para enseñar a jugar el fútbol. Iago Martínez Miguel no se lo pensó dos veces cuando le hicieron la propuesta y disfruta de una experiencia profesional bien pagada y enriquecedora.

Llegó al páis asiático después de que no fructificaran algunas propuestas que tenía sobre la mesa. Tras haber trabajado como preparador físico en el Pontevedra C.F. y en el Celta, coincidió en Boiro con José Luis Lemos, «uno de los mejores entrenadores que encontré», asegura. «Para esta temporada no nos salió nada y, por mediación de un amigo, llegó esta oportunidad y decidimos venir a vivir la experiencia y aportar algo al fútbol de China», asegura.

Iago trabaja en una academia como entrenador de U14 y ayuda a los preparadores físicos de allí con clases en los colegios de la ciudad de Shenzen, una metrópoli de 10,6 millones de habitantes que es la más densamente poblada de China. Es uno de los grandes centros económicos del país, donde se encuentra el Ping An Finance Centener, que con 599 metros de altura, es el cuarto edificio más grande del mundo.

«El entrenador español está muy bien valorado aquí, ya que tenemos una buena formación y unos buenos resultados con nuestra metodología», afirma. La forma de funcionar de los clubes en China es diferente al caso de España. «Aquí los grandes clubes no tienen cantera y existen diferentes academias cuya función es desempeñar esa labor de formación y con las que tienen convenios. También los propios colegios firman convenios con esas academias para que los entrenadores enseñen a jugar al futbol a sus alumnos. «Generalmente, los colegios que ganan torneos tienen un gran prestigio en la ciudad», afirma. Otra gran diferencia es que no se compite cada fin de semana, sino que los equipos se preparan para distintos torneos a lo largo del año», dice. Su academia tiene un convenio con el Shenzhen F.C., cuyo entrenador es el exmadridista López Caro. Son más de 400 niños de todas las edades entre colegios y clubes.

El idioma

Una de las mayores dificultades a las que se enfrenta a diario es el idioma. Para superar esta barrera, siempre trabaja al lado de un intérprete que traduce las órdenes a sus jóvenes jugadores. «Entrenamos dos asistentes chinos, dos traductores y yo, aunque procuro trabajar con el inglés para esforzarme a aprender mejor el idioma. Luego siempre aprendes alguna palabra en chino», afirma. Se encarga de la dirección deportiva de 23 chavales, que pueden ir rotando. «Siempre viene gente de prueba porque el club manda jugadores a equipos españoles como Leganés, Getafe o Alcorcón», afirma.

Pese a estar viviendo una experiencia muy enriquecedora desde un punto de vista personal y profesional, no descarta regresar en función de las oportunidades que se vayan presentando. «Aunque estamos bien, la idea es que si a Lemos le sale algo en Galicia volveremos porque hicimos un buen grupo de trabajo y la verdad es que hay equipos profesionales que se interesan por nosotros y en el fútbol todo cambia de un día para otro», asegura.

Reconoce que al principio le costó adaptarse a una cultura tan diferente. «Nos costó acostumbrarnos al horario y los primeros días tienes que hacer revisiones médicas y papeleos, pero la verdad es que nos aclimatamos muy bien. La gente nos trata estupendamente. La comida es muy buena. Aún así, son muy diferentes a nosotros», asegura.

Tampoco se queja del sueldo, puesto que le pagan el salario equivalente al de un entrenador de un equipo de segunda B. Además la academia para la que trabaja le abona el transporte, el alojamiento en un hotel que tiene apartamentos y la comida, por lo que el sueldo es casi íntegro para él.

Formación. Es licenciado en Ciencias de la Actividad Física por la Universidad de Vigo y máster en preparación física y readaptación de lesionados en el fútbol.

Centro financiero chino. Shenzhen es una de las ciudades de mayor crecimiento del mundo.