«Las migraciones son un reflejo de los desequilibrios económicos»

Olga Suárez Chamorro
Olga Suárez REDACCIÓN / LA VOZ

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Álvaro Ballesteros

El profesor de la USC está convencido de que el fenómeno migratorio seguirá existiendo en el futuro de Galicia

01 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La historia de Galicia siempre ha estado ligada a la de los movimientos migratorios, los más destacados a principios del siglo XX, pero también en la Edad Media. Julio Hernández Borge coordina la Cátedra Unesco sobre Migraciones de la USC y está convencido de que es un fenómeno que seguirá vigente en el futuro, puro reflejo de los desequilibrios económicos existentes.

-Siempre se ha hablado de las grandes oleadas de la emigración. ¿Cuándo empezó todo?

-La emigración ha formado parte de la historia demográfica de Galicia. A lo largo de la Edad Media ya destacó la presencia de gallegos en diferentes corrientes hacia Portugal, ambas Castillas o Andalucía. Pero, sin duda, fue a partir del siglo XIX, especialmente desde la segunda mitad, cuando la emigración se convirtió en Galicia en un fenómeno de masas, con salidas cada vez más numerosas hacia el continente americano.

-¿Cuál fue la etapa masiva de la emigración transoceánica?

-El período entre 1880 y 1930, con la excepción de los años de la Primera Guerra Mundial.

-Y tras el conflicto bélico, volvió la emigración...

-Sí, de nuevo en el tercer cuarto del siglo XX Galicia sufrió unas salidas importantes de población que se dirigieron primero hacia América (sobre todo en los cincuenta) y desde comienzos de los sesenta al continente europeo. El período 1960-1974 fue el de mayor intensidad, sin olvidar los desplazamientos dentro de España.

-¿A que se debieron estos desplazamientos masivos?

-En estos años Galicia conoció una importante despoblación de su medio rural y una intensificación de su proceso de urbanización, y cambios internos dentro de la comunidad desde el medio rural hacia las principales áreas urbanas.

-¿Se habla de una misma oleada para los casos de una misma época que fueron a distintos países?

-En general, sí. Se habla de emigración transoceánica para las etapas de finales del siglo XIX y principios del XX, pero también para la que se dio en los años cincuenta del siglo XX, aunque la presencia de gallegos no fuese igual en todos los países: fue mayor en Argentina, Cuba, Uruguay o Brasil. Y lo mismo sucede con la denominada emigración continental, de los años sesenta y principios de los setenta, dirigida mayoritariamente a Suiza y Alemania.

-¿Cómo se define el inicio y fin de una oleada?

-Por el volumen de emigrantes: cuando el número empieza a ascender y cuando va desapareciendo la corriente.

-¿Cuándo se frenó ese movimiento masivo?

-En las últimas décadas del siglo XX, la emigración dejó de tener el carácter masivo de antaño, llegando a tener Galicia saldos migratorios positivos por retorno de emigrantes y también por la llegada, modesta, de extranjeros.

-¿Cómo serán las oleadas migratorias del futuro?

-Las predicciones son difíciles y arriesgadas: por ejemplo, que España se convirtiese en país de inmigración no era algo esperado unos años atrás. De todas formas, en el futuro seguirá habiendo migraciones, dado que, aunque las motivaciones económicas no son las únicas que influyen en los desplazamientos de población, sí son las más importantes y las migraciones no dejan de ser un reflejo de los desequilibrios económicos existentes.

«Los éxodos afectan a gente joven con un grado de formación muy diferente»

La emigración no desapareció totalmente de Galicia y, desde el año 2008, cuando comenzó la crisis, se ha registrado un repunte de las salidas al exterior. Ahora afectan, sobre todo, a una población joven con un grado de formación muy diferente al de sus antepasados.

-¿Qué diferencias hay entre el emigrante de hoy y el de ayer?

-La crisis económica hizo que se reanudara la emigración exterior, un hecho que coincide en ambos períodos; pero estos nuevos emigrantes no son tan numerosos y se diferencian notablemente de sus predecesores en el grado de formación alcanzado, ya que buena parte de los jóvenes que parten ahora para el extranjero tienen estudios medios, formación profesional o, en muchos casos, carreras universitarias para las que las posibilidades de encontrar colocación en Galicia son muy limitadas. Esto supone una doble pérdida: cuantitativa, ya que contribuirá a acentuar la crisis, y cualitativa, al no poder contribuir en el desarrollo socioeconómico de la comunidad autónoma.

-¿Qué temas se abordan en la Cátedra sobre Migraciones?

-Desde su creación, hace algo más de 20 años, hemos fomentado actividades en el ámbito de la docencia y de la investigación sobre las migraciones. La última publicación, a finales del pasado año, se dedicó a las migraciones y la sanidad.

-¿Qué fenómenos migratorios interesan investigar?

-Todos los referidos al momento presente y al pasado. Se han abordado temas muy diversos, como la emigración y la literatura, éxodos y retornos, migraciones e interculturalidad, la emigración en el cine o el papel de la mujer...