El presidente ha participado de la celebración del centenario del himno gallego.
31 dic 2007 . Actualizado a las 11:07 h.El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, ha rendido hoy homenaje a la «dignidad» de la emigración repartida por todo el mundo, durante la celebración en La Habana del centenario del himno gallego, que los ciudadanos del exterior crearon en la capital del país caribeño, al igual que la bandera de Galicia.
El jefe del Ejecutivo gallego intervino este mediodía (seis horas más en España) en un acto de homenaje a la emigración y al himno, como símbolo de la «unión de todos los ciudadanos gallegos», en conmemoración del centenario de esta música de Pascual Veiga con letra del Poeta Eduardo Pondal, en el mismo escenario donde se interpretó por primera vez el 20 de diciembre de 1097, el Teatro García Lorca, antiguo Centro Gallego.
Al acto asistieron primeras autoridades cubanas, como el vicepresidente, José Ramón Fernández, que calificó el acto de «histórico» y revelador de la amistad entre los pueblos gallego y cubano; y del Consejo de Estado, Carlos Lage, al igual que la presidenta del Parlamento de Galicia, Dolores Villarino, y diputados de los tres partidos con representación en la Cámara: Miguel Santalices, del PP; Xosé Paz Antón, del BNG, e Ismael Rego, del PSOE.
El acto institucional, que cerró el programa del apretado viaje del presidente de la Xunta a Cuba, fue retransmitido en directo por Televisión de Galicia, con conexiones en varias de las ciudades del mundo, donde es más significativa la emigración gallega: Buenos Aires, Salvador de Bahía, Montevideo y Barcelona.
En su intervención, el jefe del Ejecutivo gallego recordó que tanto el himno de Galicia como su bandera son producto de la emigración en La Habana. Por eso, dijo que el acto se trató de un homenaje a los «hombres y mujeres que tuvieron que dejar Galicia en la búsqueda de una vida mejor» e insistió en que la deuda con los emigrantes «nunca podrá ser saldada»,
Pérez Touriño señaló que, después de su interpretación por primera vez en La Habana, los gallegos encontraron en la letra y la música del himno un «antídoto contra el desarraigo y la distancia» e indicó que simboliza «la unión de todos los ciudadanos gallegos, sea cual sea su forma de pensar, sus opciones políticas o sus creencias en cualquier materia».
De hecho, previamente al acto, y cuando la prensa le preguntó por las palabras del dirigente popular Alfonso Rueda, que indicó que el viaje de Touriño «pone tierra de por medio» para ocultar las diferencias en el seno del Gobierno autónomo, no quiso insistir en este asunto y se limitó a decir que no se debe poner «tacha a la obra», porque está orgulloso, dijo, de que fuesen los gallegos en el exterior quienes crearon estos símbolos de identidad.
«Quiero decir, señaló Pérez Touriño en el Teatro García Lorca, que el himno gallego forma parte inexcusable del mejor legado galleguista y democrático, de la herencia de dignidad y fe transmitida por miles» de emigrantes que pasaron «dificultades y sacrificios para que en Galicia y en el resto de España reinase la libertad, la democracia y el autogobierno».
Por eso, el himno «es nuestro, de todos, de todos los que nos sentimos gallegos y también de los que, sin ser gallegos, entienden y comparten esa voluntad y ese sentimiento», concluyó Pérez Touriño, que previamente al acto anunció a la prensa que el día 20, en que se cumple el centenario, habrá otro acto de celebración en Santiago.
Por su parte, el vicepresidente cubano, José Ramón Fernández, «Gallego Fernández», aunque es de origen asturiano, calificó la conmemoración del centenario del himno como «acto histórico de gran amistad» entre gallegos y cubanos y recordó que muchos emigrantes «combatieron en la lucha del pueblo cubano por su completa independencia, en una y en otra época».
Fernández también se refirió a los «fuertes e indestructibles» lazos existentes entre gallegos y cubanos, dijo en el acto, en el que también le fue entregada al presidente de la Xunta la primera partitura para orquesta del himno gallego que se conserva.
Según datos del Censo de Residentes Ausentes, en Cuba viven unos 8.500 gallegos, de los que más de mil reciben prestaciones asistenciales, más de 400 nacidos en Galicia y el resto, descendientes directos, señaló Pérez Touriño a la prensa.
Previamente al acto del centenario, el jefe del Ejecutivo gallego asistió a otro con representantes de los gallegos de Cuba, en el centro Cultural Rosalía de Castro, donde se ofrecen clases de música y cultura gallega. Allí, Pérez Touriño insistió en que Galicia «no sería nada» sin la emigración, porque «en ella nacieron nuestras identidades».
Pérez Touriño parte esta noche (madrugada en España) a México, en una también breve visita de tres días en que tendrá la oportunidad de entrevistarse con el presidente del país, Felipe Calderón, así como con colectivos de la emigración y grupos empresariales.