Touriño rinde homenaje a los exiliados que llevaron la bandera de Galicia

Efe

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El presidente gallego participó hoy en un emotivo acto de homenaje al exilio gallego en México, celebrado en el Ateneo español de la capital federal, ante un grupo de refugiados y sus familias.

13 dic 2007 . Actualizado a las 23:15 h.

El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, ha agradecido hoy a los gallegos exiliados en México que tras la Guerra Civil hubiesen «transportado a través del océano» la bandera azul y blanca «de nuestros valores» y también que hubiesen acrecentado «el orgullo» de un pueblo que, con su cultura, «sólo aspira a hermanarse con todos los pueblos del mundo».

El presidente gallego participó hoy en un emotivo acto de homenaje al exilio gallego en México, celebrado en el Ateneo español de la capital federal, ante un grupo de refugiados y sus familias, en lo que constituyó el último acto de su visita a este país.

El acto, que comenzó con la proyección de tres documentales de uno de los exiliados, el cineasta Carlos Velo, sirvió también para que el presidente de la Xunta expresase el agradecimiento a México por haber acogido a gallegos que se adaptaron a este país, pero conservando sus raíces y su cultura.

En el Ateneo, declarado por la Ley de Memoria Histórica institución de la memoria de exilio español, Pérez Touriño apuntó que el recibimiento que México dispensó a los españoles «del éxodo y el llanto», entre ellos muchos gallegos, «sobrecoge como un grito de dignidad, como una llamarada solidaria entre las cenizas de un mundo convulso».

«Gracias, México», señaló el jefe del Ejecutivo gallego, que también tuvo un reconocimiento para el presidente del país, Felipe Calderón, que ayer le recibió y «abrió de nuevo las puertas de su residencia al pueblo de Galicia», y también expresó su agradecimiento al pueblo mexicano y al general Lázaro Cárdenas, que abrió el país al exilio español durante su mandato.

Pérez Touriño citó uno a uno a destacados gallegos en el exilio, así como a los llamados «Niños de Morelia», que fueron llevados a México tras la contienda española a esta ciudad mexicana.

Entre los que en este país encontraron «refugio y protección», citó a hombres y mujeres que supieron «incorporar sabia mexicana a sus raíces gallegas», que destacaron en diferentes materias, como Arturo Souto en las artes plásticas, un hombre que falleció cuando iba a regresar a Galicia.

También citó a Carlos Velo, cuya familia también estuvo presente, lo que aprovechó para anunciar que Galicia le rendirá «un gran homenaje» con motivo de su próximo centenario.

El presidente citó al biólogo Bibiano Osorio Tafall, al realizador Demetrio Bilbatúa, la actriz Prudencia Grifell; los hermanos Mayo, fotógrafos; o a los representantes del mundo de las letras Florencio Delgado Gurriarán, Lorenzo Varela, Rafael Dieste; Alejandro Finisterre, Angel Lázaro o Víctor Rico Galán, entre otros.

«A todos ellos, y a los muchos que no he mencionado, quiero expresarles, en nombre de Galicia, que es su país y el mío, el agradecimiento más profundo por su sacrificio y su trabajo», dijo el presidente de la Xunta al concluir el acto, al que asistió el embajador de España, Carmelo Angulo.

Antes de Touriño intervino el presidente del Ateneo, Carlos Vélez, que insistió en que esta institución es «fiel a los ideales» de los exiliados que lo fundaron en 1949, mientras el secretario general de Comunicación de la Xunta, Fernando Salgado, presentó una edición facsímil sobre el papel de los gallegos en el exilio en México.

Con este acto, el presidente de la Xunta concluye su visita de tres días a México, donde además de haberse reunido con colectivos de la emigración, fue recibido por el presidente del país, Felipe Calderón, y mantuvo varios encuentros de carácter empresarial.