Siete míticos huevos de Vigo

Begoña Rodríguez Sotelino
begoña r. sotelino VIGO / LA VOZ

EUROPA

M.MORALEJO

Antía Sánchez expone en Finlandia obras de bronce inspiradas en leyendas nórdicas

08 jun 2023 . Actualizado a las 00:52 h.

El principio de todo (Kaiken Alku, en finlandés) es el título de la exposición basada en la mitología escandinava basada en el Kalévala, que narra cómo se transforma el universo a partir de siete huevos. En el primer poema de la epopeya nórdica, un pájaro pone sus huevos en las rodillas de una diosa y a partir de ahí, se genera el universo. Esa es la simbología, pero la artista viguesa Antía Sánchez la ha convertido en realidad y se los llevará literalmente en la maleta para volar con ellos a la ciudad finlandesa de Kuopio.

La obra que desarrolló conjuntamente con su pareja, el finlandés Hannes Aleksi ,se expondrá sobre unas peanas de madera quemadas con la técnica japonesa del Shou Sugi Ban en la galería Minna Canthin, de la ciudad al norte de Helsinki. Aunque ya tiene comprador, la autora tiene en mente poder realizar una exhibición clónica más cercana al lugar de la puesta, es decir, en el norte ibérico. Aunque el origen de las piezas es cerámico y en este material sí se pudieron ver en el 2020 en la Fundación Sales, donde tienen un espacio permanente y muy buena relación, a la viguesa le gustaría presentarlos en su versión maciza: «Se puede reproducir. Los moldes están en la fundición de Cuqui Piñeiro en Goián, donde los hicimos, y la idea es sacar varias tiradas. Me da pena que no se exponga antes en España una obra que por ahora solo pudieron ver mis alumnos en el taller de Vigo. Está hecha con mucho cariño, con tanta filigrana, que cada uno es como una pequeña joya», describe. La autora apunta que aunque la manufactura de este último proyecto es suya, siempre firma junto a Aleksi sus creaciones artísticas.

La relación de Antía Sánchez con Finlandia es ya una larga historia que comenzó hace 20 años, en el 2003, cuando era estudiante de Bellas Artes en la facultad de Pontevedra y se fue con una beca Erasmus al país que presume de ser el más feliz del mundo y el hogar de Papá Noel y la tradición navideña. Aunque la viguesa regresó a casa tras el período formativo, los lazos que se crearon en aquella estancia se fortalecieron con el paso del tiempo. «Mantuve conexión con gente de allí, hice varias exposiciones y en el 2018, durante una residencia artística conocí a Hannes y la relación creativa vino por intentar pasar más tiempo juntos», reconoce. Involucrados con el Land Art, desde que se aliaron han facturado varios proyectos, entre ellos dos esculturas de grandes dimensiones, una de ellas en el jardín del Museo Nacional de Finlandia y otra, un encargo que instalarán este mes, un monumento al movimiento cultural conocido como carelianismo, «como el romanticismo europeo, a lo escandinavo», explica.

Sánchez se considera pintora, pero en el confinamiento entró en contacto con la escultura y desde entonces combina ambas disciplinas. Además, combina su trabajo en su casa-taller AlaSelva en la zona antigua del barrio de Navia, con la didáctica de una forma muy inclusiva. De lunes a miércoles desarrolla sus proyectos, y jueves y viernes los dedica de forma intensiva a dar clases. «Mis alumnos está de forma constante en contacto con la obra que genero y con mis vivencias artísticas, hay un trasvase interesante, no solo es aprender técnicas», añade.

Además, cada cierto tiempo organiza una experiencia de gran éxito, las sesiones monográficas con una copa de vino Paint & Wine, en las que invita a diferentes artistas a dar una masterclass, como Pelucas o Diana Cordero.