Un coruñés monta una empresa de comida a domicilio en Italia

Olga Suárez Chamorro
Olga Suárez A CORUÑA / LA VOZ

EUROPA

Prepara recetas españolas y gallegas en la ciudad de Valeggio

09 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

«Cucina spagnola e specialitá galiziane» El Cocinero es una empresa creada hace tres años en Valeggio, ciudad italiana situada en la región del Véneto y su alma máter es un joven coruñés («de la calle Hospital», concreta), Alexandre Pallas Arroyo, que decidió hacer las maletas a los 20 años para «ver mundo».

Italia no fue su primer destino emigrante y reconoce que ha tenido «pocos trabajos normales» desde entonces. Amante de los animales, se trasladó a Tenerife para trabajar en un zoológico como entrenador de papagayos. Gracias a esta experiencia, pudo viajar a Italia para hacer un espectáculo y le surgió la primera oportunidad laboral en este país, en el parque de atracciones Gardaland de Verona. Allí estuvo hasta el año 2010 (con una interrupción de dos años, en los que trabajó de entrenador de delfines en un zoo safari de Puglia). Pero el parque de atracciones echó el cierre y Alexandre se vio obligado a volver a buscarse la vida. Empezó entonces su aventura emprendedora, primero entrenando perros y después cambiando totalmente de rumbo al abrir un negocio de comida a domicilio. Pero no cualquier comida: especialidades gallegas.

¿Por qué ese cambio radical? «Algunos amigos que habían probado mi paella me animaron a montar una empresa, así que estudié hostelería en horario nocturno y en el 2015 nació El Cocinero. Además de los platos que ofrece en la web, organiza cenas privadas y para empresas, imparte cursos de gastronomía española en dos escuelas de cocina y colabora con varios restaurantes haciendo platos temáticos. Todo ello al servicio del cliente, sin tener un local propio donde poder degustar sus creaciones: «No estoy seguro de querer abrir un local, el servicio a domicilio es un modo nuevo de hacer hostelería que permite horarios más flexibles», explica. De momento, no cuenta con ningún empleado, aunque para cenas grandes contrata a dos chicos de forma eventual.

Sobre sus especialidades, Alexandre lo tiene claro: «El pulpo á feira arrasa, quien lo prueba se enamora». También la tortilla y la empanada están muy solicitadas. Por el contrario, reconoce que el marisco no es muy conocido en esta zona de Italia, «si alguien se lanzara a traerlo aquí creo que haría muy buen negocio». La que no es desconocida es Galicia. Explica que adoran el Camino de Santiago y conocen al Dépor, «en especial los hinchas del Milan que no olvidan aquel 4-0 en Riazor».

Alexandre Pallas está bien asentado y en sus planes de futuro no entra regresar a Galicia a corto plazo: «Me he italianizado, mi familia está aquí, mis hijos nacieron aquí». No descarta, sin embargo, regresar en el futuro: «Si me jubilo, aunque todavía falta mucho».