Una tudense, tercera mujer comandante de un buque de la Armada española

Monica Torres
mónica torres TUI / LA VOZ

ESPAÑA EMIGRACIÓN

Marina Goicoechea Margalef está al frente del hidrográfico Antares

05 ago 2018 . Actualizado a las 06:00 h.

Marina Goicoechea Margalef acaba de convertirse en la tercera mujer comandante de un buque de la Armada española. «Soy gaditana de adopción, pero se puede decir que tengo el corazón partido porque yo siempre me he sentido muy orgullosa de ser gallega y, especialmente, de ser de Tui», asegura la flamante comandante del buque hidrográfico Antares.

Su currículo la ha subido al podio que hace trece años alcanzaron Esther Yáñez González y, poco después, Anita Sánchez, quien precisamente estuvo al frente del patrullero Cabo Fradera de Tui. Haberlas hailas. O no. La tercera mujer con mando en plaza de la historia de la Armada asegura que la coincidencia entre su nombre y vocación solo se debe a la casualidad y deseo de su hermana mayor: además de ser hija del Luis Carlos Goicoechea, que fue durante un tiempo el mando de la Comandancia Naval del Miño, es la única de los cuatro hermanos que siguió sus pasos, y los primeros los dio en Tui.

Tomó posesión como comandante el Día de Galicia, con 37 años. La festividad no le pasó desapercibida cuando asumió el mando del Antares el 25 de julio en Cádiz. «Nuestra misión es actualizar toda la cartografía náutica para la seguridad de todos los buques y tenemos la base en la Estación Naval de Puntales», explica. Bajo su mando hay 35 hombres y mujeres. «Nos destacan un mes o mes y medio en cada lugar y luego volvemos a puerto, siempre en aguas españolas», indica la comandante. Los dos años anteriores fue jefa de Hidrografía en el buque Malaspina. En este cargo colaboró con la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Occidental en la búsqueda de Marta del Castillo, mediante exploraciones con medios hidrográficos y oceanográficos realizadas en el río Guadalquivir.

Fue una de las primeras mujeres en ingresar en la Escuela Naval Militar de Marín. Lo hizo en agosto del 2002, para licenciarse cinco años después y regresar a Tui con toda la familia.

«Yo me fui con un año, mis hermanos eran mucho mayores y siempre dicen que la mejor etapa de su infancia fue en Tui, pero yo soy la única que puede presumir de haber nacido ahí», bromea la comandante.

«No podía ser una vocación desde la infancia porque de aquella no había mujeres en el Ejército y cuando ingresé ya había varias», recuerda. De hecho, cursó un año de Medicina en Sevilla hasta que decidió cambiar su rumbo.

«Aprobé primero, pero en el 2000, cuando mi padre pasó a la reserva, decidí presentarme a las oposiciones. A mí siempre me había encantado el mar y el trabajo de mi padre», explica Marina Goicoechea. Contó con la bendición paterna «porque, además, él ya vivió el inicio de las mujeres en las Fuerzas Armadas durante sus últimos años de servicio y además confiaba en mi preparación física porque siempre me gustó e hice mucho deporte y, por lo tanto, tenía muchos niños como amigos». «Mi decisión ya estaba reflexionada cuando se la dije y nunca me preguntó ni si estaba segura», confirma.

Ser mujer no fue un hándicap para Marina Goicoechea, pese a ser de las primeras en la Armada. «En la Escuela Naval fueron cinco años magníficos, yo siempre me sentí uno más de la promoción, éramos todos iguales. Ni entonces ni durante todos estos años he sentido nunca que se marque alguna diferencia en la Armada por ser hombre o mujer, siempre han sido experiencias muy sanas», afirma.

Su primer destino fue la fragata Victoria y en el 2009 participó en la operación Atalanta contra la piratería en el océano Índico. En julio de ese mismo año pasó destinada al buque de desembarco anfibio Pizarro y participó en la operación CS de mantenimiento de la paz, con la recogida de tropas en Bosnia y Herzegovina. Después se especializó en Hidrografía y hasta agosto del 2014 estuvo en el buque hidrográfico Tofiño. Desde entonces ha tenido otros destinos como teniente de navío hasta asumir el mando del Antares.

Marina Goicoechea ha ganado la Cruz al Mérito Naval con distintivo blanco y una medalla por su participación en Atalanta y, aunque pasa la mayor parte del tiempo fuera, Tui está en su DNI. Y hasta en su correo personal.

Ha ganado la Cruz al Mérito Naval con distintivo blanco por la operación Atalanta