Los reyes apoyan al empresariado español en Cuba frente al embargo de EE.UU.

mercedes gallego LA HABANA / COLPISA

INTERNACIONALIZACIÓN

Juan Carlos Hidalgo

«No ignoramos las dificultades a las que hacéis frente», afirma Felipe VI

14 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Más de 70 hoteles españoles sobre los que gira el grueso del sector turístico en La Habana están en la mira de EE. UU., cuyo presidente Donald Trump está decidido a ganar la reelección con el voto venezolano y cubanoamericano de Florida. Esa es solo una de las muchas dificultades que «los españoles tenemos muy presentes», dijo ayer Felipe VI al millar de compatriotas que recibió en el Gran Teatro de La Habana. El mensaje era contundente. Pese a la distancia, no están solos. «Los españoles saben lo mucho que habéis construido aquí», dijo. «No ignoramos las dificultades a las que hacéis frente. Nuestras autoridades están trabajando para aliviar su impacto sobre vosotros», prometió.

Con el Estado cubano aún más quebrado por el recrudecimiento del embargo y el colapso venezolano, las empresas españolas se enfrentan ya a 350 millones de euros en impagos. El Banco de Sabadell concentra el 75-80% de los flujos de capitales, por lo que entre los instrumentos que gestiona el Gobierno para afrontar este problema se encuentra la diversificación de las soluciones financieras. «En Cuba siempre había hecho falta mucha flexibilidad para hacer negocios, pero en los últimos años esa flexibilidad se ha ampliado demasiado», lamentó Josep María Berga, presidente de la empresa de embalajes Alzamora Group. El empresario catalán es uno de los 18 que se reunieron ayer con el rey para hacerle partícipe de la situación, porque «la Casa Real tiene una fuerza y potencial que no tiene el presidente (del Gobierno)».

Algunos, como el representante de la cadena Iberostar, demandada en EE. UU. bajo el título III de la Ley Helms Burton activada por el Gobierno de Trump, han hecho inversiones multimillonarias durante la expansión propiciada por Obama. La cadena Meliá, también presente en el almuerzo, tiene cinco hoteles en la lista negra de EE. UU. El proceso judicial puede durar años y ser contrarrestado después con acciones similares de la UE, pero Washington ya ha conseguido que webs como Booking y Trivago los saquen de su oferta. «¿Quién les compensará por esta pérdida de negocio?», se preguntaba Alberto Navarro, embajador de la UE en Cuba.

Uno de estos hoteles, el de San Carlos en Cienfuegos, ya está amenazado. La familia Mata, propietaria del edificio antes de la revolución, presentó una demanda en un juzgado de Florida. Meliá ya ha sido notificada de que si no paga la compensación reclamada el hotel será incluido en la lista negra. BBVA y Air Europa también están entre las afectadas, aunque son los hijos de estos empresarios españoles los primeros en sufrir las consecuencias: no tienen visados para estudiar en ese país. En la UE se negocia reactivar las medidas de protección aprobadas en 1996 en respuesta a la Helms Burton, pero las empresas que tienen matrices en EE. UU. quedan desamparadas. Eso las obliga a decidir si hacen negocios con Cuba, que carece de fondos para pagarles, o en EE. UU. Un chantaje «inmoral», se indignaron fuentes diplomáticas. Son circunstancias «singulares, emotivas y complejas», admitió el rey en su discurso, tras prometerles su «total apoyo».