Tú a Auckland y yo a Vigo

Alejandra Pascual Santiago
alejandra pascual VIGO / LA VOZ

INTERNACIONALIZACIÓN

María Bamio y Andrew Terris crearon Aroha Ibérica, empresa dedicada a la importación y exportación de productos de alto standing entre Galicia y Nueva Zelanda

31 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Aroha Ibérica es una empresa surgida del amor entre una gallega y un neozelandés. La palabra aroha es de origen maorí y significa eso, amor, el vínculo sentimental que une a estos dos socios. Su firma se dedica a la importación y exportación de productos de alto standig entre Galicia y el norte de Portugal y Nueva Zelanda y Australia.

María Bamio y Andrew Terris se casaron hace dos años, superando los cerca de 20.000 kilómetros que separaban sus respectivos lugares de origen. Esa distancia la han convertido ahora en un puente laboral. Él ya se considera «un kiwi gallego» y fan absoluto de esta tierra. Su espíritu aventurero les ha llevado a emprender el reto de ligar, comercialmente, las antípodas.

Los dos productos esenciales que esta pareja importa a España son el salmón y el vino. De hecho, han sido pioneros en traer hasta la península al King salmon, una especie que supone únicamente el 2% de la producción total del salmón y presume de una reconocida calidad. Se caracteriza por lucir un color más anaranjado y contener un 15 % más de omega 3. «Y el complemento ideal con el que casar este producto es el vino», se lanza a aconsejar Bamio. Curiosamente, el nombre de la marca que tratan de introducir en Galicia es el de Marisco. La denomianción fue pura coincidencia: el bodeguero se apellida así y quiso mantener esa designación para su marca. Se trata de un vino joven, de reconocida calidad tanto en Nueva Zelanda como en Australia y que no lleva corcho, ya que «en estos países está prohibido por razones de sostenibilidad», aclara la empresaria. De hecho, explica que todos los vinos gallegos que se preparan para ser enviados a Oceanía ya no cuentan con el detalle del corcho desde su fabricación.

Entre los productos que exportan destacan el textil del hogar y la ropa de baño de Portugal «de alta calidad y de diseño». Su colaboración más estrecha es con la marca Selmark. La gran contribución que realiza es la línea Selmark Care, de lencería destinada a mujeres que sufren cáncer de mama terminal. Diseñan sujetadores de calidad, funcionales y con un estilo con el que sus compradoras se sientan atractivas. «Nos sentimos muy comprometidos con este proyecto, que se sientan guapas durante esta etapa también es importante, les aporta una cierta vitalidad», apunta María Bamio.

Una de las claves que motivan el éxito y la aceptación de las importaciones gallegas en Oceanía es la consideración que tienen en este continente de los productos europeos. «Lo asocian con la calidad», dice la socia de Aroha Ibérica. «Están muy invadidos por China y acostumbrados al producto low cost de baja calidad, lo importado desde Europa adquiere un valor diferente», añade refiriéndose también a la alta capacidad adquisitiva de los neozelandeses.

Promoción en Sidney

Las primeras exportaciones desde el noroeste de la península Ibérica hasta Nueva Zelanda empezaron a comienzos de este año, para dar a conocer artículos de origen gallego y portugués en la feria de Sidney. En este mes de agosto se realizará el segundo envío, coincidiendo con varias degustaciones gastronómicas, de salmón y vino, organizadas en las Rías Baixas. En este sentido, Bamio se refiere también al importante coste económico y de control que suponen las exportaciones al otro lado del mundo. «Nos agrupamos junto a otros proveedores europeos», apunta.

Recientemente, María y Andrew organizaron en la terraza del hotel Axis una cata del King salmon ahumado para un grupo selecto de profesionales del sector hostelero de Vigo como sumillers o maitres del hotel Nagari, Los Abetos o la Central. «Está curado con madera de manuca, que le otorga un aroma diferencial. Normalmente aquí se cura con madera de haya», explicaban ellos mimos en la degustación.

Su reto es ahora el viaje continuo de ambos para fomentar el comercio. Algo así como una película, Tú a Auckland y yo a Vigo.