Alejandro Muñiz, un gallego en la La liga: «Nunca piensas en llegar a Primera, arbitrar en Tercera ya te parece que es la élite»

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CAPOTILLO

Este pontevedrés de 30 años asciende a la máxima categoría después de dos años arbitrando en Segunda

23 jun 2021 . Actualizado a las 10:22 h.

Alejandro Muñiz está en una nube que él mismo define como «una tensión muy grande en el cuerpo». Una tensión, eso sí, de felicidad. De todas las posiciones que podía escoger en el fútbol, él se quedó con la del mediador. Después de 15 años arbitrando, la Federación Española de Fútbol lo acaba de ascender a Primera División. Pontevedra volverá a tener un árbitro en la élite del fútbol nacional después de estar en blanco desde la temporada 1993-94, cuando se retiró Bello Banco. «Cuando empiezas a arbitrar ni se te pasa por la cabeza acabar en Primera, cuando estar en la Tercera División ya te parece que es la élite», explicaba ayer Alejandro Muñiz. En 15 años ha pasado de dirigir un encuentro autonómico de categoría cadete a sancionar a jugadores que hoy están en la selección española. Cree que detrás de este logro hay muchas horas de trabajo y «una pizca de suerte». Tan serio como humilde, Alejandro Muñiz asegura que no hay nada que le asuste. Ni siquiera los gritos desde la grada de estadios en los que caben miles de personas. «En el campo no oigo nada de lo que me dicen, solo es ruido. A mi me gusta disfrutar de las gradas llenas porque el fútbol es fútbol por el público», apunta este pontevedrés de 30 años.

La pregunta era obligada. ¿Te ves arbitrando un Real Madrid-Barça? Y la respuesta, clara: «No, hay que ir paso a paso». No puede dirigir un partido con un equipo de su comunidad para evitar posibles favoritismos, pero Muñiz es tan profesional dentro como fuera del campo y no se deja llevar por la pasión de los colores. «Yo soy de la selección española», dice este pontevedrés.

Ascensos y descensos

De los 22 árbitros de Segunda ascienden dos y descienden otros dos. «Es como un jugador destacado de un equipo que se va para otro, salvo que nosotros siempre somos del mismo», explica. En ese proceso de selección se tienen en cuenta muchos aspectos que le hacen dar el salto. En su caso llevaba dos años dirigiendo equipos de la división del plata. «Trabajo muy bien la condición física porque cuanto más cerca y mejor colocado estés respecto a la jugada, tendrás más posibilidades de acertar», comenta. ¿Y si eso no pasa? «Si estás donde tenías que estar y te equivocas, no vale de nada darle vueltas», asegura Alejandro Muñiz, que reconoce que los árbitros pueden cometer errores, pero generalmente arbitran bien: «Siempre se dice que falla el delantero y nunca que acierta el portero, pues con nosotros es lo mismo».

El próximo mes de septiembre comenzará una nueva etapa en su carrera sin olvidar todo el camino que ha recorrido para llegar aquí. Le cuesta saber cuál ha sido el arbitraje más complicado de su carrera, pero reconoce que a veces los partidos más importantes, como play off de ascenso o descenso, no son los peores. «Es mucho más complicado cuando son encuentros con manos dentro del área, faltas o acciones dudosas. Eso pasa, a veces, cuando no se juegan nada», explica Muñiz. Dedicará el verano a prepararse aún más físicamente porque si algo cree que tiene la Primera División del fútbol es velocidad. «Me espero un cambio de velocidad en el juego respecto a lo que estoy acostumbrado. Un balón en el centro del campo bien controlado puede acabar en gol en tres jugadas», apunta Alejandro Muñiz, que ya cuenta los días para que arranque la liga.