Blanca Millán llama a la puerta de la WNBA esta madrugada

Manuel García Reigosa
M. G. REIGOSA SANTIAGO / LA VOZ

DEPORTISTAS

GONZALO BARRAL

Los doce clubes de la liga americana escogen a 36 jugadoras en el «draft»

15 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Blanca Millán espera el draft de la WNBA con la misma tranquilidad con la que hace cinco años preparaba la selectividad y se aprestaba a dar el salto a la NCAA (liga universitaria americana), desde el colegio Peleteiro hasta la Universidad de Maine. Ahora sueña con dar otro gran paso, desde Maine a uno de los doce equipos que disputan la competición de baloncesto profesional de más alto nivel.

Hay una diferencia respecto a hace un lustro. Entonces pudo elegir destino, entre varias instituciones académicas que querían incorporarla a sus filas. Para acceder a la WNBA precisa que su nombre sea uno de los 36 que escogerán los clubes para la nueva temporada en la ceremonia que se celebra esta madrugada, a partir de la una.

A menos de 48 horas para la gran cita, Blanca Millán intervino en directo en el programa La mañana con Eva, en Radio Voz. Y la misma tranquilidad que expresaba con sus palabras era la que transmitían sus sensaciones.

Le trasladaron una pregunta de Víctor Fernández, el que fuese su entrenador en Peleteiro. Mostró interés por saber qué cosas cree que debe mejorar en su juego, y le pidió que enviase un mensaje a las jóvenes de 14 o 15 años que juegan al baloncesto, porque es a esa edad cuando hay más jugadoras que deciden dejar el deporte de la canasta.

A la primera pregunta respondió con la máxima que aplica en su carrera y que se puede resumir con un aforismo que utiliza a menudo Moncho Fernández, entrenador del Obradoiro: «Si no mejoras, empeoras». En palabras de Blanca Millán, «siempre se puede mejorar en todo».

A quienes compaginan ahora los estudios y el baloncesto les dio un consejo y un aviso: que disfruten del deporte, y que sepan que se van a encontrar con días difíciles, incluso con momentos en los que se pueden plantear si merece la pena. Y «sí merece la pena».

Mejor internacional de la NCAA

Llega al draft después de inscribir su nombre como una de las mejores jugadoras de la historia en el equipo de las Black Bears de Maine y de coleccionar un sinfín de distinciones. La última, esta misma semana, en la que fue elegida mejor jugadora internacional de la temporada en la NCAA. Además, ha completado la carrera de Kinesiología y Educación Física, y la ha complementado con estudios de nutrición y de desarrollo infantil y relaciones familiares, a falta de solo un par de exámenes.

El siguiente paso es el salto al baloncesto profesional. Esta madrugada sabrá si accede a su gran sueño, la WNBA. Si no es una de las 36 elegidas todavía le quedará la opción de participar en los campamentos de entrenamiento que organizan las franquicias antes de que comience la liga, en busca de las últimas incorporaciones. Y si tampoco se le abre esa puerta tendrá la posibilidad de elegir entre algunas de las propuestas que ya le están llegando a su agente desde Europa.

El draft será telemático y lo seguirá desde su piso, arropada por compañeras de equipo y amigas, y en contacto con sus padres a través de face time.