Pascual Caballero: «En Níger trabajaba con seis médicos para 100 ingresos al día»

Pablo Varela Varela
pablo varela OURENSE / LA VOZ

COOPERANTES

Pacual Caballero es coordinador internacional de casos clínicos en una plataforma de telemedicina
Pacual Caballero es coordinador internacional de casos clínicos en una plataforma de telemedicina Santi M. Amil

El pediatra de Médicos Sin Fronteras impartió una ponencia en el Colegio Médico de Ourense sobre los cambios recientes en cooperación sanitaria

04 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El pasaporte de Pascual Caballero, pediatra en Médicos Sin Fronteras, reserva un sello también para su paso de este martes por Ourense, donde impartió una charla en el Colegio Médico sobre los cambios de la cooperación sanitaria en los últimos años. Él los conoce bien, porque ha trabajado desde los 30 años por todo el planeta.

-¿Por qué África?

-Uno se considera ciudadano del mundo y desde la medicina tuve la oportunidad de devolver a la comunidad lo que la vida me dio con la oportunidad de ser pediatra. Y África es un sitio donde la carencia de profesionales sanitarios es enorme. Pero también estuve en lugares como la India, Yemen o Haití.

-Al hilo de Haití, ¿cómo se lucha contra casos de abuso dentro de organizaciones humanitarias?

-El tema de la integridad es fundamental, para que confíen en ti. La gente debe saber que tú estás allí para ofrecer ayuda, y no que vas a abusar de esa situación de crisis en la que se encuentran. Pero además, también por la propia percepción de la entidad por parte de los donantes. Si hacen un esfuerzo por apoyarnos, que sea para hacer algo bueno.

-¿Cómo lo vivió desde fuera?

-Siempre hay quien no tiene una motivación humanitaria al 100 %. Y en Médicos Sin Fronteras les interesa mucho saber cualquier tipo de problema de esta índole que se pueda producir. En el caso de Haití, yo estuve en el 2011 y muchos se destaparon posteriormente y ocurrieron también en los cascos azules de la ONU. Y no se puede consentir que casos puntuales, manzanas contaminadas, ensucien el resto de lo que hay en el canasto. Hay que destaparlos.

-¿Qué experiencia le dejó su trabajo con la telemedicina?

-La tecnología es una herramienta que favorece un contacto más cercano con otros lugares. Y la podemos usar para la telemedicina para comentar casos que ocurren en zonas más aisladas, con menos médicos y enfermeros. Por ejemplo, para que un radiólogo u oncólogo te ayude a proponer tratamientos o realizar un diagnóstico.

-¿Sigue realizando este tipo de tareas mientras viaja por el mundo?

-Hay varias plataformas de este tipo en todo el mundo y una es la de Médicos sin Fronteras. Un enfermero de Sudán del Sur te escribe y en unas horas puedes darle información con recursos para el caso que ha planteado, sea urgente o no. Y eso funciona si trabajas con personal cercano. Yo estoy en España, pero puedo estar respondiendo casos de cualquier parte en la que yo haya tenido experiencia sobre el terreno.

-¿Qué país le dejó marcado?

-Níger es un país de los más pobres del mundo. En 2012 no había cosecha y sí malnutrición, y hubo una gran epidemia de malaria. Teníamos un hospital donde yo era el único pediatra con seis médicos nigerinos en un hospital con 100 ingresos diarios. Durante cinco meses, estuvimos en esa dinámica. Fue un proyecto duro, pero supuso una gran madurez personal y profesional.