La historia de Ricardo Doldán Paradela, natural de la villa del encaixe
10 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Que no manden aquí a sus hijos, que ya no hay Américas. Solo en esta capital -se refiere a México- hay 4.300 dependientes españoles sin destino, pidiendo limosna por las calles para no morirse de hambre». (La Voz de Galicia, del 27 de septiembre de 1885).
Ricardo Doldán Paradela fue uno de esos miles de habitantes de la Costa da Morte que en los principios del siglo XX cogieron el camino de las Américas. Originario del municipio de Camariñas, emigró también para un país, Argentina, en las primeras décadas del siglo XX, seguramente con un pasaje de tercera y sin oficio declarado, renunciando a la precaria situación económica y a la escasez que le ofrecía su tierra natal.
Hacia América del Sur
Ricardo se fue para las Américas del Sur, meta en la mayoría de los casos sin retorno, dispuesto a sobrevivir y a hacer del país austral su patria, y también la de sus hijos. Para ello tuvo que abrazar, aunque de forma transitoria, la incertidumbre, y superar dificultades y titubeos, puesto que la resignación no fue con él.
Una vez asentado en tierras del río de La Plata, consiguió salir adelante y en 1929 fue elegido representante por su municipio, Camariñas, en la sociedad ABC del Partido de Corcubión, en Buenos Aires, lo que muestra que su posición social mejoró de forma notable con el tiempo, cobijándose entre los suyos, los demás inmigrantes de su terruño natal.
La imagen que acompaña a esta reseña, publicada en la revista Alborada de aquella sociedad emigrante, no evoca fracaso; al contrario.