Asesinado en Panamá un emigrante de Boborás que había pasado el verano en Galicia

La Voz OURENSE / LA VOZ

AMÉRICA

Álvaro Vaquero

Obdulio Vázquez apareció maniatado en su casa y se sospecha que fue víctima de un robo

10 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

En el pueblo de Saa, en el municipio ourensano de Boborás, varias ruinas y restos de viejas casas dan cuenta del origen de Obdulio Vázquez. En una de ellas nació hace 84 años y otra, reventada por los incendios de las últimas semanas, guardaba parte de la memoria familiar y era su «casa na aldea», como recuerda su vecina Carmen García Barreiros.

En Saa, en Boborás y en O Carballiño la noticia del asesinato de Obdulio Vázquez en Chitré (Panamá) se vivió como un mazazo. Uno más en una zona con una emigración masiva en algunos de los países que suelen ser noticia por este tipo de sucesos: Panamá fue un destino preferente para los vecinos de Boborás que decidieron buscarse la vida del otro lado del Atlántico, lo mismo que México lo fue para los nacidos en los municipios limítrofes de Beariz y Avión.

En Saa la incredulidad dio paso a la cruda realidad: a Obdulio Vázquez lo mataron cuando entraron a robar en su casa y apareció amordazado y con signos de violencia. El ourensano se dedicaba a la venta de muebles y el macabro hallazgo lo realizó un empleado de su hermano, que se acercó hasta la casa al no tener noticias del fallecido.

«Viña sempre á festa»

Carmen García Barreiros lo recuerda perfectamente. «Viña moito e sempre se achegaba ata a aldea. Este ano estivo de vacacións no verán e viña sempre á festa do Santo Antonio do verán, o que pasa é que este ano, como non se celebrou, non coincidimos nela. Nós somos veciños da porta», recuerda al tiempo que muestra las casas próximas a la suya. Wbaldina Estévez Domínguez -que reitera machacona que «non é con ‘U’ é Wbaldina, con ‘W’»- se muestra consternada: «Era unha gran persoa e aquí sentímolo moito. Eran compadres el e o meu marido, que xa morreu hai anos, e non ten perdón do ceo que o mataran desa maneira. O que non sei é se traerán as cinsas para enterrar aquí». Ella también fue emigrante, más de 20 años repartidos entre Suiza y Alemania, «e tamén estiven en Panamá, pero alí só fun de vacacións».

Otro de los que pasó por Panamá es el concejal Emilio Estévez, emigrante hasta hace 14 años. Allí sigue su hijo, y él regresó para cuidar a sus padres. Este vecino de Saa se pasó el día pegado a sus dos teléfonos móviles -el personal y el del Concello- pendiente de las noticias, de las llamadas y de los mensajes. «Coñézoo dende pequeno e alí coñecín á súa filla, que ten un bufete de avogada na cidade de Panamá, que queda a uns 250 quilómetros de onde vivía o pai».

De Saa marcharon todos los hermanos -José, Asunción, Bernardino, Ricardo, Ramón y Obdulio- y solo quedaban vivos los dos que estaban en Panamá: Obdulio y Ricardo.

El vecino de Boborás al que asesinaron en Panamá para robarle pasó este verano en O Carballiño. Estuvo los meses de julio y agosto con María de la O, hija de su sobrina Emilia, en su casa del barrio de Rapariz. Ella declinó ayer hacer declaraciones, solamente confirmó que había sido en su vivienda donde se alojó.

En Saa también mantiene casa Aurora, sobrina del emigrante asesinado. Ella estuvo en el pueblo hasta el pasado lunes, día 6. Ese día regresó de vuelta a Panamá.