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El Mesón Galicia de Hamburgo será examinado por Chicote

Alemania

B. P. l. redacción /  la voz

«Pesadilla en la cocina» regresa hoy a La Sexta con nuevas tensiones y «personalidades incontrolables»

15 Apr 2015. Actualizado a las 08:51 h.

Vuelve Chicote esta noche a La Sexta con los guantes de boxeo puestos, preparado para agitar la parrilla con Pesadilla en la cocina. Las cuatro verdades que él suele decir sin reparo a los propietarios de restaurantes en apuros y los tensos enfrentamientos verbales que se producen con algunos de ellos han convertido al chef en uno de los grandes personajes televisivos de los últimos años.

La cuarta temporada de Pesadilla en la cocina promete ir, según la cadena, más al límite, «cargada de personajes incontrolables, tensión extrema, brutales desafíos y un Alberto Chicote más seguro de sí mismo y cercano que nunca».

Las nuevas entregas viajarán a lugares que no habían visitado hasta ahora y, por primera vez, el programa saldrá al extranjero para visitar un restaurante gallego en Alemania. Se trata del Mesón Galicia en Hamburgo, donde conviven «el reflejo de la España actual y de la de hace casi medio siglo» a través de un padre que emigró a Alemania durante el franquismo y de sus hijos, también obligados a irse allí por la crisis española.

En la nueva temporada, el chef visitará lugares como Ibiza y Andorra, locales en entornos como una cala paradisíaca, un local medieval y un hotel y se acercará a especialidades de cocina griega, marroquí, vegetariana y un local de comida gigante.

Además, el programa ofrecerá dos especiales titulados ¿Qué fue de...?, en los que volverá a visitar ocho restaurantes, como Cool Palace o La Parrilla de Poli, que se sometieron al estricto juicio de Alberto Chicote en temporadas anteriores, para ver cómo les ha ido y si les han servido de algo los consejos del chef.

En el primer programa, el cocinero intentará rescatar un restaurante ubicado en una antigua estación de tren de Murcia y que está regentado por un exparacaidista del Ejército cuya mujer lo dejó todo por él. Una calidad mejorable y las continuas discusiones entre el dueño y la jefa de cocina han hecho necesaria la intervención de un especialista.


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