«Los postres de Taiwán parecen potajes», dice Daniel Negreira
Actualidad
El chef gallego cuenta las peculiaridades de vivir en el país asiático en su «Diario de Taiwán»
07 Apr 2008. Actualizado a las 19:39 h.
Desde que ha emigrado, Daniel Negreira hace de observador y relata a sus familiares y amigos, como es la vida en la isla. En el «Diario de Taiwán», como lo ha bautizado, cuenta las peculiaridades y costumbres del país asiático. Lavoz.es publica algunos de los relatos del jefe de cocina compostelano:
Los postres taiwaneses
En este tema no me extenderé mucho, sólo comentará que más que una carta de postres parece un catalogo de potajes. He probado una cosa que parecen garbanzos con carne. Si os fijáis en la foto que os adjunto hay una suculenta variedad, desde algo que parecen garbanzos a lentejas verdes así como alubias negras y demás variantes, pero el sabor no es muy bueno ni la textura muy agradable, así que no os lo recomiendo.
Las peluquerías
Aquí las peluquerías son algo distintas a las de España. No hay revistas de cotilleo, hay periódicos y cada persona tiene su pequeño plasma para ver lo que le de la gana, cosa que resulta muy cómoda aunque no piensan en los extranjeros (no hay satélite - tampoco hay que pedir tanto)... Otra diferencia es que el corte de pelo comienza con un masaje de hombros y cuello de una media hora, luego viene el corte, y luego el lavado, con doble masaje capilar y tras esto diez minutos con la cabeza envuelta en toallas calientes mientras echas una siestita, magnifico, después de esto te aplican un tratamiento reparador. La última diferencia es el precio: Todos esos cuidados cuestan 5,10 euros.
El mercado para los extranjeros
El Miaokon es un mercado para los que no hablan chino, como yo. Es un lugar en el que tienes cientos de puestos de distintos tipos de especialidades para comer cosas desde coreanas hasta japonesas, chinas, indias, taiwanesas. Menos paella tienen de todo... Pero lo mejor es el ambiente, un revuelo de gente comiendo y divirtiéndose, es como un antiguo zoco romano y la comida cuesta en media 1 euro, así que sale mejor que quedarse en casa. Yo he comido una dorada de unos 400 gramos con jengibre y unas salsas y he pagado como 2,5 euros y estaba buenísima, recién sacada del agua.