La artista gallega María Arceo, la conciencia del plástico en el río Támesis

Rita Álvarez Tudela LONDRES / E. LA VOZ

REINO UNIDO

rita a. tudela

La creadora es la figura central en un festival de Londres con una instalación que es un clamor en defensa del entorno

18 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La artista compostelana María Arceo protagoniza la entrega del 2017 del festival londinense Totally Thames con su instalación Future Dust (Polvo futuro), en la que recopila y ordena a su modo todo tipo de restos plásticos recolectados durante el último año en las más de cuarenta playas que jalonan la cuenca del río Támesis.

La presente edición del certamen -que engloba más de 150 eventos e iniciativas cuya organización está programada durante todo el mes de septiembre- fue defendida por el alcalde de la capital británica, Sadiq Khan, como «una celebración increíble, que dará a todos los vecinos de la ciudad la oportunidad de explorar y reencontrarse con el Támesis».

Además de la fascinación por la preocupación de visualizar el impacto ambiental que los hábitos humanos están teniendo en el planeta, el trabajo de Arceo clasificando por colores los residuos y la basura que recoge del río, a la par que examina la contaminación plástica, ha sido potenciado y realzado por la iluminación -en esta ocasión- realizada por el artista de luz interactiva holandés Tim Scheffer.

Arceo, que recientemente completó una residencia artística en la Universidad King’s College de Londres, pretende desafiar la comprensión y permisividad de los ciudadanos sobre la dispersión de residuos plásticos -y de otros materiales- en los ecosistemas fluviales y marinos. Una anécdota que refleja esta obsesión: en una ocasión, cuando caminaba por la orilla del río, un arqueólogo le comentó que allí podría encontrar incluso calzado de la época romana.

Un carta de amor y una pistola

Este hecho la hizo reflexionar sobre lo que sucederá con los plásticos si un material natural como el cuero puede tardar más de 2.000 años en degradarse. Empezó así una visita constante a las playas para recoger basura, que luego fue llevando a su taller, donde la limpia y clasifica por su composición y su forma para confeccionar sus instalaciones. Entre los restos, ha encontrado elementos de lo más dispares, como una carta de amor a la artista Kate Tempest y una pistola alemana de alrededor de 1910 que estaba envuelta en una bolsa de plástico.

«Quería crear una huella plástica para el río de Londres, el Támesis. Además de la contaminación, también me interesa la forma en la que la naturaleza envejece y remodela estos objetos producidos en masa. Se vuelven únicos dependiendo de cómo se erosionan y se tratan. Este proceso natural crea nuevas esculturas de muchas maneras», explica Arceo.

Tras varios años de limpieza del cauce del Támesis, reconoce que el río está ahora en mejores condiciones -al menos, visuales- que nunca, lo que puede hacer que para sea difícil darse cuenta de la cantidad de plásticos que arrastra. Así, su instalación Polvo futuro muestra, por ejemplo, cuánto plástico puede retirar una sola persona tras cuarenta jornadas de limpieza.

«Para hacer a los londinenses conscientes de la cantidad de plástico que hay en el mar, y que como mucho acaba ahí porque no ha sido arrojado a la papelera, quiero hacer una conexión con el plástico que hay en sus calles y el que termina en el Támesis, y finalmente, en la playa. Esta obra está tratando de cuantificar y desmitificar cuánto plástico hay por ahí, y hacer ver cómo podemos tener un control sobre este desastre», añade.

Arceo pretende así que la sociedad cuestione, entre otros aspecto, sus hábitos de consumo y el modo en que debe ser tratada la recolección de basura. «Nos olvidamos de que residen más de ocho millones de personas en Londres y de que los sistemas que tenemos actualmente no son adecuados», lamenta.