El Reino Unido cobrará por adelantado la sanidad a los extranjeros no residentes

Rita álvarez tudela LONDRES / E. LA VOZ

REINO UNIDO

ISABEL INFANTES | AFP

Salvo en una urgencia, los pacientes deberán demostrar que viven en el país británico

07 feb 2017 . Actualizado a las 11:50 h.

El Reino Unido llevaba un tiempo buscando un plan para reducir la cifra de gastos del sistema sanitario público, el conocido como NHS, y acaba de anunciar la puesta en marcha de una medida polémica: cobrar a los pacientes extranjeros no residentes que no necesiten atención urgente. El plan del Gobierno de Theresa May pasa por obligar a los hospitales a que comprueben por adelantado si los pacientes son elegibles para el tratamiento gratuito del NHS; es decir, si no son pacientes residentes habituales en el Reino Unido, tendrán que pagar por adelantado para poder usar el servicio sanitario.

La ley se pondrá en práctica a partir de abril de este año. En un comunicado oficial se muestran seguros de que «jugará un papel vital» en los planes de Downing Street para recuperar hasta 500 millones de libras al año de los visitantes extranjeros que no son elegibles para los cuidados gratuitos y cortar así el llamado «turismo sanitario».

«No tenemos ningún problema con los visitantes extranjeros que utilizan nuestro NHS, siempre y cuando hagan una contribución justa, al igual que el contribuyente británico», recalcó el ministro de Sanidad británico, Jeremy Hunt, quien anunció que el objetivo pasa por reinvertir el dinero «recuperado» en el cuidado de los pacientes.

En la actualidad, los hospitales tienden a enviar a los pacientes extranjeros no residentes una factura después del tratamiento. Según datos oficiales, en los años 2012 y 2013 el NHS cobró el 65 % de lo que tenía derecho a exigir a los visitantes que viven fuera del Espacio Económico Europeo, y el 16 % de lo que le correspondía a los visitantes dentro del EEE, recuperando así 89 millones de libras.

En el polémico anuncio no queda claro cómo comprobarán los hospitales la residencia de los extranjeros. La medida podría afectar a los españoles residentes en el Reino Unido, que se cifra en 200.000 individuos, donde se calcula que unos 40.000 son visitantes semanales, de los cuales algunos se quedan a vivir sin registrarse.

El movimiento se produce después de una semana en la que los responsables del NHS hayan criticado el turismo sanitario, diciendo que los intentos hasta la actualidad de combatir el problema habían sido «caóticos». Precisamente ayer la BBC publicó cómo nueve de cada diez hospitales públicos británicos están saturados desde diciembre. Si bien los hospitales no deberían de tener más del 85 % de las camas ocupadas, según la cadena, 137 de 152 hospitales han ocupado más camas de las debidas desde diciembre.

Los críticos con el plan lamentan que son «desproporcionados» y que pueden causar problemas incluso para los ciudadanos británicos que no puedan mostrar un pasaporte o sus facturas de luz, agua y teléfono, ante la falta de un documento nacional de identidad en Reino Unido.