David Mozo: «Aquí pierdes el miedo»

Maite Rodríguez Vázquez
Maite rodríguez OURENSE / LA VOZ

REINO UNIDO

David Mozo se fue a las islas británicas a aprender inglés y a avanzar en su carrera

06 feb 2017 . Actualizado a las 08:03 h.

David Mozo es uno más de los miles de españoles que han buscado fortuna en Londres. En su caso, no porque estuviera sin empleo o con un trabajo mal pagado, pero no era feliz. Trabajaba en oficinas bancarias, con horario de ocho a tres, un buen sueldo y los fines de semana libres, pero quería algo más y decidió emprender su segunda aventura consecutiva en las islas británicas. La primera había transcurrido en Irlanda, adonde se fue a aprender inglés después de terminar la carrera de Administración y Dirección de Empresas que cursó en Madrid.

Aquella primera vez le costó irse y conseguir defenderse con el idioma. Su primer trabajo, recuerda, fue limpiando habitaciones en un hotel de lujo. Pero le pagaban bien y pudo viajar a Budapest, Berlín o Italia, con vuelos baratos y durmiendo en aeropuertos. Por aquel entonces pensaba en volverse a España y para ello ahorraba. «Mi mentalidad era de volver a Galicia, me considero muy de ahí, tengo morriña, pero ahora estoy muy a gusto aquí», explica. El poder cursar un MBA de una entidad financiera gallega y la llamada materna eran otros motivos para querer volver, pero David Mozo decidió quedarse en Irlanda hasta cumplir el año de estancia.

Cuando volvió a Galicia, hizo el máster que buscaba y estaba a punto de conseguir un puesto de trabajo en el sector en Ourense, pero quería mejorar su inglés en Inglaterra. Aún hoy, después de siete años entre anglosajones, reconoce que a veces sufre «malentendidos» por la lengua. Y es que, a pesar de estar en contacto con ingleses, David Mozo admite que hace su vida con españoles. «Un buen amigo inglés no he tenido», resume. La primera parada fue Oxford, donde residía su novia de entonces. Fue camarero en un bar español y trabajó en una tienda de una multinacional española como jefe de cajeros. Su objetivo era introducirse en el departamento financiero, para lo que necesitaba sentirse seguro con el inglés. Luego pasó a los recursos humanos de una firma italiana de lujo, formando parte de su equipo contable durante tres años. Para acelerar su carrera, se buscó una titulación de contabilidad de gestión y estratégica, para poder dar el salto a los ámbitos donde se toman decisiones en las empresas. Y es que David Mozo reconoce que la experiencia en las islas, con un mercado laboral mucho más desarrollado, le ha permitido cambiar de mentalidad. «La diferencia en el trabajo es brutal. Aquí pierdes el miedo. Hay muchas oportunidades y la gente se mueve mucho. Es muy enriquecedor. Si eres buen trabajador y juegas bien tus cartas, ellos se dan cuenta y no quieren perderte», valora el ourensano.

La idea de volver a Galicia sigue ahí. Con la intención de montar un negocio. «Pero lo veo difícil, hay barreras e impedimentos. Si trabajo para terceros, tendría que tener la suerte de caer en una empresa europeizada», advierte el expatriado. Ya no soportaría lo de hacer «miles de horas para calentar el asiento». Quiere la flexibilidad y el trato profesional que ha vivido en Inglaterra.

De Oxford se mudó a Londres, una ciudad difícil si no se posee un poder adquisitivo muy alto. Tuvieron que vivir en una habitación. Del sector de la moda pasó al tecnológico, a una plataforma de contacto entre compradores y vendedores. Fue un trabajo exigente, que le permitió alcanzar el siguiente nivel: una empresa de comparadores de precios online de mudanzas y de primas de seguros. Es una start up en la que trabaja en un frío estudio en el Soho, pero Mozo cree que tiene mucho potencial y en ella ha conseguido la meta de hacer contabilidad de gestión.