Nervios e ilusión en la prueba a los fontaneros para emigrar a Holanda desde Carballo

s. g. CARBALLO / LA VOZ

EUROPA

JOSÉ MANUEL CASAL

Varios profesionales de la zona aspiran a un empleo en una empresa de los Países Bajos

27 abr 2017 . Actualizado a las 10:35 h.

Había algunos nervios, inquietud, expectativas, ilusión... Un poco de todo entre los 13 fontaneros que aspiran a trabajar en Holanda como fontaneros, en caso de ser seleccionados tras las entrevistas realizadas ayer en el Fórum de Carballo, y naturalmente en caso de que les interesen la condiciones. Trece, al menos, a la hora en la que estaba fijado el encuentro con el representante de la empresa que busca a estos profesionales, aunque en realidad se habían anotado 20. Uno de ellos, Javier Mosquera, es de Arteixo, asegura que está «interesado» en marcharse. «No me importa hacerlo fuera de España», señala. Ni tampoco a su compañero, Hicham Habari, también de Arteixo. «Me gustaría irme», explica. Mosquera añade: «Es una buena oportunidad, aquí ya no hay muchas más». En todo caso, estaban interesados en las condiciones.

De explicarlas se encargó Fabián Navarrete Carmona. Necesitan 120 fontaneros, y le faltan (o le faltaban hasta ayer) unos 30. La elección de Carballo para seleccionar a muchos de ellos (a poder ser, a todos) se debió a las referencias halladas y al servicio que presta la Bolsa de Traballo. De hecho, su responsable estaba ayer por la tarde supervisando todo el proceso selectivo. También influye haber elegido el norte porque el sector de la fontanería y la calefacción es mucho más potente que en otras comunidades, aunque por ejemplo, en Torrevieja, han logrado contratar a doce personas.

Además de reunir una serie de condiciones profesionales, los candidatos deben tener un mínimo de inglés. O, al menos, el compañero (actuarán en equipos de dos). Para aprender, hay una ayuda de 900 euros para cursos. A los elegidos también se les imparte un curso de riesgos, fundamental para empezar a operar, que como mínimo será por cuatro meses. «Pero hay trabajo para 8 o 10 años en la construcción», asegura Navarrete. Que está en auge, pero bajo control.

El salario de los fontanero escogidos será de 1.750 euros al mes, además de vivienda, en grupos de cuatro. También el vestuario, o tres billetes de ida y vuelta al año a España (uno cada cuatro meses). Las dietas no están incluidas.

Navarrete indicó que él mismo es fontanero, «un compañero más» de los que entren en la empresa, De Uitlener, que tiene su sede en Lochem (Holanda), con una sede en Elche. Su búsqueda de profesionales también se extiende a otras áreas de la construcción. Pero en Carballo buscaban fontaneros.