Japón se abre a Galicia

Jonathan Touriño / M. H.

INTERNACIONALIZACIÓN

Un total de 289 empresas gallegas exportaron a la tercera economía mundial el año pasado. La UE y el país asiático firmarán un pacto comercial que podría entrar en vigor en el 2019

24 jun 2019 . Actualizado a las 15:30 h.

El pasado 6 de julio, la comisaria de Comercio de la Unión Europea, Cecilia Malmström, y el ministro de Exteriores japonés, Fumio Kishida, sellaban el mayor acuerdo bilateral que haya concluido hasta el momento la UE con otro país. Un convenio, que tardó cuatro años en cuajar, y para el que falta la aprobación del Parlamento Europeo y de los 28 -que se prevé para mediados del 2018- y con entrada en vigor en el 2019. La alianza implicará que el país nipón accede a suprimir gran parte de sus tasas, que alcanzaban los 1.000 millones de euros anuales para los miembros de la Unión. De ellos, unos 134 millones de euros corresponden a derechos arancelarios que se aplican sobre el vino, un sector especialmente importante para España. Bruselas anunció que uno de los sectores más beneficiados por el acuerdo es el de la agroalimentación, con una previsión de aumento de venta de bienes del 180 % para la comida procesada, siendo Japón el cuarto mercado para la UE.

Panorama gallego

Para la Consellería de Economía, la evolución de empresas que exportan a Japón «ven sendo positiva», al registrar un incremento en los últimos cuatro años del 35 %, pasando de 214 compañías en el 2012 a 289 el año pasado.

Con esas cifras, el país asiático se afianza como segundo mercado comercial del continente, solo por detrás de China. La facturación de las mercancías gallegas en el 2016 alcanzó los 96,5 millones de euros, un incremento del 14 % sobre el 2015. La Administración gallega recalcó que este año va también por buen camino: «Nos catro primeiros meses, o comercio exterior a ese mercado medraron un 10,91 %» y ya son 160 las compañías gallegas que han exportado al territorio nipón durante ese período.

Asimismo, el departamento autonómico resaltó que el sector con mayor incremento interanual es el de la agroalimentación, con una subida del 23 %. Un dato poco sorprendente, al tratarse del cuarto mercado en alimentación y bebida de la UE.

La Consellería resalta que los japoneses valoran «a moda galega ou, especialmente, produtos alimentarios que destacan pola súa calidade, como viños, algas, xamóns ou castañas». La industria agroalimentaria ve ante sí la posibilidad de abrirse a un país de unos 127 millones de compradores, que será más atrayente con la cercana derogación de muchos impuestos alimentarios. La supresión total (o parcial) de tasas en artículos como el vino, la carne de cerdo, el queso o incluso el vacuno permitirá a las que ya tienen negocio en el país nipón, aumentar sus ventas y sus beneficios. En el caso de los caldos, el acuerdo facilitará a las vínicolas gallegas poder competir en condiciones de igualdad con países como Estados Unidos o Chile, el mayor exportador en Japón y que goza desde hace años de un acuerdo comercial.

Sector automóvil

Otra industria que podría verse favorecida, según anunció la Comisión Europea, es la automoción, que representa el 19 % del total del comercio nacional en el exterior. Un pilar de la economía gallega. Sirva como ejemplo el acuerdo firmado con Corea del Sur en el 2011, en el que las constructoras europeas temían un aumento masivo de importaciones de coches coreanos. El resultado en el 2014 demostró que las ventas en el exterior se triplicaron en comparación con el año anterior a la firma (2010). De momento, el acuerdo entre Japón y los 28 es parecido al de Corea del Sur. Con el añadido de que la UE se reserva la posibilidad de volver a aplicar aranceles a los coches japoneses.

«A nosotros directamente no nos va a afectar mucho»

Torre de Núñez, tiene perspectivas positivas con el acuerdo. La jamonera lucense ya lleva unos años apostando con fuerza en Japón, donde casi el 30 % de las piezas consumidas en el 2015, tenían su firma. Este año sigue con cifras al alza y Angel Lamas, director de exportación de la compañía, afirma que «Japón es muy interesante, está importando un 20 % más que el año pasado». Por lo cual, es muy probable que el acuerdo permita seguir en esa línea ascendente. Pero Lamas asegura que «a nosotros directamente no nos va a afectar mucho», ya que venden el jamón a precio de fábrica y la importación la lleva una empresa japonesa. La supresión de los 8,5 % de arancel correrá a cargo de la firma que importa los artículos de Torre de Núñez, por lo que todo dependerá de lo que hace la empresa japonesa con ese cambio y si reflejará la totalidad en el coste del producto o no. Si bajan el precio, es muy factible que la jamonera gallega siga ampliando su cuota de mercado, en cuanto a jamón. Angel Lamas recalca que otro de los beneficiados de este acuerdo logrado por la UE es Italia y su prosciutto, y quedará por ver si el cliente japonés se decante más por el jamón español o el italiano. Aún así, confía en que Torre de Núñez siga aumentando su peso en el país asiático. Pero la firma lucense no se queda ahí, y también tiene previsto vender en el país nipón panceta («ahí se vende mucha panceta italiana», afirma Lamas) y chorizos.

José Manuel Núñez Torre, gerente de la empresa | alberto lópez

El vino gallego no ha parado de crecer en estos últimos años

La viticultura verá suprimida la tasa aduanera del 15 %. A pesar de que los japoneses no beben mucho en comparación con otros mercados occidentales, las cifras van subiendo año tras año. «Ellos son fundamentalmente consumidores de cerveza, tan solo el 4 % de la población bebe vino», comenta Ramón Huidobro, el secretario general del Consejo Regulador de la D.O. Rías Baixas. No obstante, añade que «todo lo que es facilitar el acceso a los mercados es positivo para incrementar las ventas», si bien también se mostró cauto y no prevé que ese cambio signifique que de un año para otro las ventas se vayan a triplicar.

La comercialización del vino gallego no ha parado de crecer en estos últimos ejercicios, al igual que el número de bodegas que exportan hacia ese mercado: «En el 2014 había 36 bodegas de Rías Baixas vendiendo en el mercado japonés, en el 2016 ya tenemos 41. Son cantidades pequeñas por bodega, unos 3.500-4.000 litros de media», recalca el secretario general. Durante esos años, el crecimiento del albariño fue de 60.000 litros para alcanzar los 150.000 en el 2016. En cuanto a la promoción de la Denominación de Origen, el Consello Regulador lleva desde el 2002 haciéndolo en Japón, participando en ferias o actividades de campañas. Incluso suelen traer a posibles compradores y periodistas para que conozcan Galicia, sus uvas y que vean in situ cómo se elabora el caldo de las Rías Baixas.

Cata de vinos albariño | martina miser