Blanca Millán: «Si entro en el draft voy de cabeza»

DEPORTISTAS

Brilla en su segundo curso en Maine y va camino de ser la primera gallega en la NBA femenina

29 ene 2018 . Actualizado a las 10:46 h.

Hace unos años, Gastón Gaudio expresaba su admiración por Rafa Nadal. He aquí algunas de sus reflexiones: «No es mejor que Federer, y le ganó, en el pasto»; «Todos los días es un poco más»; «Mentalmente es algo único». Son observaciones que se podrían aplicar a Blanca Millán, joven jugadora de baloncesto nacida en Compostela en el 98, recientemente elegida la mejor de la temporada en la Conferencia Este de la NCAA, en la que compite con las Black Bears de Maine. Está en el buen camino para ser algún día la primera gallega en la WNBA. Envuelve su discurso en las banderas de la humildad y el trabajo. Como Nadal.

-¿Aquel sueño de la WNBA ya no se ve tan lejos?

-Sigo pensando que es muy difícil, porque hay muchísimas jugadores en las conferencias y de gran nivel. Pero si sigo así, un poco más cerca, sí.

-Si entra en el draft...

-Si entro en el draft voy de cabeza.

-En los últimos años son más de una docena las españolas que han llegado a la WNBA. ¿Con cuál se queda?

-Marta Xargai, sin duda.

-¿Esperaba la elección como la mejor jugadora de su conferencia?

-No. Ayuda a que la gente te conozca más.

-Damos un salto en el tiempo. ¿Cómo recuerda su etapa en el Peleteiro?

-Nunca la olvidaré. Fue dura, porque era el equipo del colegio, quería entrenar más y con los estudios resultaba complicado, no daba el tiempo para todo. Me llegaban bastantes ofertas de otros equipos. Pero mis padres me decían que los estudios eran lo primero. Allí me formé y aprendí todo. Sin aquella etapa tampoco hubiese llegado aquí. Es mi segunda casa.

-¿Recuerda su primer día en Maine?

-Sí. Estaba mi familia y eso lo hizo más fácil. Recuerdo cuando vi el campus. Me di cuenta de que era como en las películas.

-¿Y eso de que a los deportistas universitarios les suben las notas?

-No. O trabajas o nadie te regala nada.

-Pero es impensable que un examen coincida con un partido o con un desplazamiento.

-Sí. Todo está planificado alrededor de nuestros horarios de entreno. Como mucho, hay al día tres clases. Y como viajamos bastante, son más laxos con los plazos de entrega de los trabajos.

-¿Lo de las hermandades y las fiestas también es como en las películas?

-Eso es tal cual las pelis. No salimos mucho, porque no hay mucho tiempo. Pero las fiestas en las casas de dos pisos son como se ve en el cine. Las hermandades tienen muchas actividades. Siendo deportista, no dispones de tiempo para ellas. Las ves.

-¿Qué estudia?

-Fisioterapia. El primer año fue muy general. En este ya vamos con cosas más específicas, como vendajes, masajes, etcétera.

-¿También puntúa alto en las notas?

-Va bien, muy bien. Nos las acaban de dar y saqué un 3,7 sobre 4.

-De cine, grande en la cancha y en las aulas.

-Hay más jugadoras así.

-La que más juega en el equipo, la que más puntos anota, la que más balones roba, tercera en rebotes... Casi como Doncic en el Madrid.

-El año pasado teníamos una jugadora que hacía este papel. Era sénior y acabó. Creo que completé una buena temporada, pero no bien aún. La entrenadora me dio confianza este verano. El día uno de pretemporada le dije que quería trabajar el doble. Hacía entrenamientos extra. Eso se va notando.

-¿Cómo es Maine y su afición?

-Es un sitio muy pequeño, con muchos fans cuya media de edad es de setenta a ochenta años. Lo saben todo de ti, de tu vida. Te sientes muy arropada. En cada partido hay más de mil personas en las gradas y muy buen ambiente.

-¿Llegó como «all around player» y ahora es escolta o alero?

-Sí, pero si me necesitan de cuatro también me adapto, porque soy de las aleros más grandes de la conferencia

-¿Lo de base está ya olvidado?

-Lo de base ya pasó. Además, tenemos tres buenas bases. Aquí no me siento nada cómoda jugando en esa posición.

-Ante Harvard anotó 12/13 tiros y se convirtió en la jugadora con mejor porcentaje en la historia de Maine. ¿Fue su partido más redondo?

-Sí, creo que sí. Y no sabía nada de ese récord, ni antes ni durante el partido.

-¿Cuál fue su máxima anotación?

-28 puntos, pero no recuerdo el rival.

-No todo es dulce. En 2016 logró el bronce con la selección en Hungría. Desde entonces se ha quedado a un paso de las convocatorias definitivas.

-Sí, es duro. Pero hay muy buenas jugadoras. Cuando trabajas tanto y no llega la recompensa, frustra un poco.

En corto

Las preferencias baloncestísticas de Blanca Millán son del color de su nombre.

-Última posesión para ganar el partido. ¿A quién se la da, a Kevin Durant o a Llull?

-A Kevin Durant.

-Aunque también es muy de Lull.

-Sin duda, un número uno.

-Y madridista.

-También.

-¿Steve Kerr o Greg Popovich?

-Steve Kerr.

-Un binomio más próximo. ¿Laso u Obradovic?

-Laso, por madridista

-Complete la frase: el Multiusos de Sar es...

-Increíble.

-El Obradoiro es...

-Un sentimiento.

-¿Lo sigue desde Maine?

-Sí, aunque no puedo ver todos los partidos. Solo vi los que ganaron.

-¿El de Bilbao también?

-Sí, me avisó mi padre.

-¿Estrella Galicia o Budweiser?

-No se qué decir. No soy de cervezas.

-¿Churrasco o hamburguesa?

-Churrasco.

-El pescado fresco, para cuando vuelva a casa.

-Sí, mejor. Es de las peores cosas aquí.

-¿Aficionada a la lectura?

-La verdad que no. Estoy en ello. Mi madre me insistía siempre y me mandó una caja.

-¿Recomendaría un libro?

-No me atrevo.

-¿Y la música?

-Escucho de todo, desde regaetton...

-Me lo temía.

-Pero también Andrés Suárez, Quique González, etcétera.

-Un chiste corto para acabar.

-No sé ninguno, de verdad.