Blas Charlín dice no a Armenia para dejar su huella en Angola

Pablo Penedo Vázquez
pablo penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

AFRICA

El técnico cambadés decide responder sí a la confianza del S.L. Benfica, al que espera ayudar a ganar la Liga y, sobre todo, consolidar su recién fundada academia de jóvenes

22 oct 2015 . Actualizado a las 13:04 h.

El fútbol cambadés mantendrá su pica clavada en Angola al menos un año más. Tras su primera temporada como ayudante del ex seleccionador nacional Zeca Amaral Blas Charlín Oubiña ha decidido aceptar la oferta de renovación del Sport Luanda e Benfica para continuar desempeñando su doble función de integrante del cuerpo técnico de uno de los grandes del fútbol angoleño, y responsable de metodología de entrenos de la academia que el club puso en marcha a mediados del pasado mes de mayo. Un sí acompañado de un no de Charlín a una segunda oferta procedente de Armenia.

«Tiña unha proposta de Armenia moi interesante. Pero quero terminar o meu proxecto en Angola», explicaba ayer el cambadés. Un proyecto que Blas arrancaba el pasado mes de enero, cuando se impuso en un proceso de selección de personal que el S.L. Benfica africano había abierto en busca de un entrenador español que ayudase a cambiar su metodología de trabajo junto a Amaral. «Cumprimos o obxectivo, quedar entre os tres primeiros», aunque con «pena, porque estivemos loitando polo título ata a antepenúltima xornada», relata el cambadés. Dos derrotas consecutivas por la mínima en partidos que contaba ganar, incluyendo la visita del líder y a la postre de nuevo campeón, el Libolo, relegaron al S.L. Benfica al tercer puesto final. Una plaga de lesiones de varias de sus figuras en el segundo tramo del campeonato aparece como atenuante del bajón en la última recta de la temporada, comenta Charlín. Empezando por la baja del capitán de la selección Gilberto, al que el arousano ayudó a salvar la vida en julio reanimándolo en primera instancia tras desplomarse en medio de un partido a raíz de un golpe fortuito, lo que lo convirtió en un ídolo nacional.

Tras una primera temporada en la que Blas participó en la primera experiencia de su actual club en competición internacional, eliminado por el Etoile du Sahel en la segunda ronda de la Copa Nelson Mandela -equivalente a la Liga Europa-, el ex entrenador del Pontevedra B dice querer «botar varios anos máis en Angola» y poder así cumplir con el proyecto a medio plazo diseñado por el club y que ha hecho suyo. «Quero seguir traballando con Zeca Amaral, axudar a facer unha estrutura forte no club para nun par de anos gañar a Girabola -la Liga de Primera de Angola- e ser un equipo potente en África». Y en paralelo, «seguir coa academia. Abríu en maio, e xa ten 150 rapaces de 12 a 16 anos. Cada día nos chegan máis nenos. Queremos darlles aos rapaces do barrio formación deportiva, e a longo prazo, tamén escolar», todo ello a modo de labor social sin coste para los chavales en una academia de fútbol que pretende funcionar con estándares europeos.

«Ver o primeiro e o terceiro mundo nun metro faiche repensar moitas cousas», dice Blas

Claro que el sí de Blas al S.L. Benfica no sería posible de no tener su experiencia deportiva su correlato a nivel personal. «Ir aló permitíume aprender outra cultura. Faiche repensar moitas cousas. Ver o primeiro e o terceiro mundo nun metro, a abundancia dun coche de luxo a carón doutro sen portas, xente tirando comida ao lado doutra pasando fame. Ou a nenos que ao remate do partido saltan ao campo para coller as botellas de auga que deixas mediadas nos banquiños».

«Marchei moi contento e orgulloso, co agradecemento do país e do club polo meu traballo. Acolléronme cos brazos abertos». Y por ello Charlín se volverá a dejar abrazar por Angola.