Un lucense, entre las promesas de la alta cocina

Laura López LUGO / LA VOZ

EMIGRANTES A CORTO PLAZO

Carlos Castro

Ha sido seleccionado para optar a una beca de casi 22.000 euros en la escuela Le Cordon Bleu de Madrid

15 abr 2016 . Actualizado a las 17:14 h.

La alta cocina nacional podría llevar sello lucense. Iván Rozas Muñiz, un joven de 21 años de Lugo y estudiante del ciclo superior de Dirección de Cocina en el IES Sanxillao, representa a Galicia en el IV Premio Promesas de la alta cocina, convocado por la escuela Le Cordon Bleu de Madrid, y para el que han sido seleccionados cincuenta jóvenes de toda España. Tras superar la primera fase del concurso, ahora deberá seguir mostrando su talento en la cocina para lograr una beca de casi 22.000 euros para cursar un diploma en la prestigiosa escuela Le Cordon Bleu. El segundo clasificado tendrá otra beca de 7.000 euros para estudiar un curso de cocina, pastelería o cocina española. Este año, además, también se premiará el esfuerzo de los centros con una ayuda económica de 1.500 euros, que se entregará al centro del primer clasificado.

«El premio es una oportunidad muy importante, por eso me presenté al concurso», relata Iván Rozas, aunque reconoce que será difícil resultar ganador debido a la gran competencia que hay. Ahora dispone hasta el 31 de enero para presentar una receta y un vídeo de un máximo de cinco minutos con una elaboración creativa propia de una receta: «Ya nos mandaron las indicaciones. Tenemos que elaborar lubina y mejillones ?à la marinière?. A partir de ahí, tenemos que hacer tres guarniciones a mayores, una con patata y otras dos libres», apunta el estudiante lucense, que ya tiene en mente cómo elaborarlo.

Además de la valoración del jurado profesional de la escuela, los interesados en contribuir con su voto en la selección podrán ejercer como jurado popular en la página del premio en Facebook https://www.facebook.com/premiopromesasdelaaltacocina/?fref=ts. Solo los diez mejores se medirán en la final, que se celebrará en Le Cordon Bleu el 14 de abril.

Premio al talento

Según explica Rosario Barrios, directora de la escuela de alta cocina, el objetivo de este premio es reconocer el talento y fomentar el desarrollo profesional de los mejores jóvenes cocineros del país: «Estamos encantados con la excelente acogida que ha tenido el premio un año más, y tenemos muchas ganas de ver en acción a los alumnos seleccionados. El trabajo que han hecho los participantes evidencia la importante labor que se está haciendo en muchas escuelas de cocina del país», aclara.

Este prestigioso galardón cuenta ya con numerosos seguidores entre los estudiantes de las escuelas de cocina de todo el país y con el respaldo de cocineros de prestigio, como Martín Berasategui, Diego Guerrero o Pedro Subijana, presidentes y jurados de ediciones anteriores.

Por su parte, Le Cordon Bleu dispone de más de cincuenta escuelas en veinte países, siendo la madrileña la tercera sede europea, después de las históricas de París y Londres.

Sus inicios en los fogones empezaron siendo un niño

La afición por la cocina le viene de familia a Iván Rozas. A pesar de su juventud, arrastra una experiencia y una formación que le auguran un buen futuro en el sector hostelero. Explica que su madre fue cocinera y «con 6 ó 7 años me gustaba ir a la escuela donde ella estudiaba para ver lo que hacían», confiesa. Con 17 años empezó a trabajar en la Arrocería Os Cachivaches, después terminó el bachiller, hizo un ciclo de Dirección de Servizos y ahora está en el segundo año de Dirección de Cocina.

También trabajó en Casa Marcial, en Arriondas, un restaurante con dos estrellas Michelín; en Salgar, de Gijón, con una estrella Michelín; y en Bulló Xantar, de Lugo. El año pasado, además, ganó el premio de cocina José Rodríguez Moldes que convoca el IES Fragas do Eume.

Abrir un restaurante en Lugo

El futuro lo tiene claro, dedicarse a la cocina, pero no descarta hacer una especialidad en pastelería. «Me gustaría viajar a Francia y al País Vasco para seguir formándome y después volver a Lugo y abrir aquí un restaurante», explica.

En su opinión, la creatividad está imperando cada vez más en la cocina, aunque reconoce que en Lugo todavía se apuesta más por la cocina tradicional.